Península de Yucatán, con el 60% de los manglares de todo México; reporta Atlas de la Conabio

De acuerdo con la Conabio, el estado de Quintana Roo cuenta con un total de 247 mil hectáreas de manglar, seguido de Campeche con 200 mil y Yucatán con 96 mil
jueves, 21 de julio de 2022 · 11:27

En México se estima que existen 905 mil 86 hectáreas de superficie cubiertas de manglares en todo el territorio, de las cuales 544 mil 169 se localizan en la Península de Yucatán, esto representa el 60.1 por ciento del inventario nacional.

Sin embargo, en las últimas cuatro décadas estos humedales se han enfrentado al impacto negativo de diversas actividades humanas, que han contribuido a la pérdida de estos ecosistemas en varias regiones.

De acuerdo con el Sistema de Monitoreo de Manglares de México (SMMM) los manglares en el país, representan el 6 por ciento del total a nivel mundial, lo que sitúa a México en la cuarta posición de los territorios que poseen estos ecosistemas, detrás de Indonesia, Australia y Brasil. No sólo estos hábitats son el hogar de diversas especies de seres vivos, también brindan protección natural frente a vientos fuertes, olas causadas por huracanes y maremotos.

81 sitios identificados

Vale poner en contexto que, de acuerdo con el Atlas de naturaleza y sociedad de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), en el país hay al menos 81 sitios de manglar identificados por especialistas.

Entre los sitios prioritarios de manglar en Yucatán están Celestún, Dzilam, El Palmar, Progreso, Ría Lagartos, El Cuyo, Las Coloradas, San Fernando y Telchac. Mientras que en Quintana Roo se ubican la Costa Maya, Cozumel, Nichupté, Puerto Morelos-Punta Maroma, Sian Ka’an, el Sistema Lagunar Chacmuchuc y Yum Balam.

Por su parte, en Campeche los manglares prioritarios se localizan en la frontera con Celestún, Atasta Norte, Boca del Río Chumpan, Isla Aguada-Boca de Pargos, Isla del Carmen, Petenes, Pom-Atasta, Río Champotón, Sabancuy-Chen kan y en San Pedro-Nuevo Campechito.

96 mil hay en Yucatán

De hecho, según el sitio web de Biodiversidad Mexicana de la Conabio, se estima que Yucatán tiene 96 mil 873 hectáreas de superficie cubiertas de manglar, lo que representa el 10.7 por ciento del inventario a nivel nacional; en tanto, en Quintana Roo los mangles ocupan 247 mil 17 hectáreas, es decir, el 27.2 por ciento del total en el país.

Por otro lado, Campeche también tiene una gran porción de superficie donde se encuentran estos ecosistemas, que abarcan 200 mil 279 hectáreas, o sea el 22.1 por ciento del total de los manglares mexicanos.

Financiamiento internacional

En ese sentido, de acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), en el contexto del aumento de la temperatura global derivada del cambio climático, los árboles y vegetación que habitan en los manglares ofrecen otros servicios como capturar el carbono, uno de los gases que provocan el efecto invernadero.

Es por esa razón que Bezos Earth Fund, la fundación del multimillonario Jeff Bezos, financiará a WWF con 100 millones de dólares para que ejecuten varios proyectos y acciones que incluyen la recuperación de humedales en México, Colombia, Fiji y Madagascar, así lo dieron a conocer ambas partes en el 2020.

Ahora bien, con parte de este recurso multimillonario se “financiará la protección y restauración de manglares en la región de Marismas Nacionales, en Nayarit; la Reserva de la Biosfera Río Lagartos y la Reserva Estatal Dzilam, en Yucatán; así como el Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam, en Quintana Roo, lo que beneficiará directa e indirectamente a miles personas”, aseguró Jorge Rickards, director general de WWF México.

Apoyo a comunidades

Según WWF, las soluciones que proponen para hacer frente a la crisis climática se basan en apoyar a las comunidades locales a adaptarse al cambio climático y mitigar sus impactos, “lo que genera beneficios para las personas y la naturaleza”. La organización ambiental explica que los manglares son zona de alimentación, refugio y crecimiento de peces y crustáceos, lo que beneficia a gran parte de las actividades productivas pesqueras; también “controlan la erosión, sirven de filtro biológico y hábitat de gran cantidad de flora y fauna, entre otros servicios ambientales”.

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CC