Especies endémicas de Yucatán, en peligro por falta de educación ambiental

La MVZ, Elizabeth Sánchez Domínguez puntualizó la importancia de proteger las especies endémicas, ya que en el municipio de Tizimín nadie regula que las depreden o que se comercialicen de manera ilegal, señala que las autoridades muestran su desidia para promover la educación ambiental.

Expuso que los seres humanos deben estar en simbiosis con la fauna silvestre ya que sin ella no hay un medio ambiente, un equilibrio ecológico, ya que cada uno de los animales tienen fines biológicos porque algunos son dispersores de semillas para que se produzcan frutos y semillas en diversos lugares, mientras que otros son reguladores de plagas, evitan la sobrepoblación de especies y hacen posible el equilibrio del ecosistema.

Externó que en el municipio hace falta que las autoridades se preocupen por darle oportunidad a la gente que quiera educar a la población en torno a la educación ambiental y promover el cuidado de la fauna silvestre.

Lo anterior hizo énfasis porque mucha gente cuenta con animales no convencionales en cautiverio, en sus casas, pero no tienen idea alguna del cuidado que conllevan y mucho menos de su alimentación, poniendo como ejemplos ardillas, diversidad de aves.

Otro punto importante que señaló fue el tráfico ilegal de especies como la de los loros a la que contribuye la gente por la demanda que ejercen hacia ellos favoreciendo a quienes incurren en este delito, indicó que otra forma de contribuir a la depredación de la fauna silvestre es consumiendo carne de venado, de jabalí, tepezcuintle, de cereque, entre otros que son asesinados masivamente por cazadores furtivos.

Mencionó que prueba de que nadie se preocupa por los animales es que en otros estados a conciencia de que se extingue el venado cuentan con sitios para su cría, cuidado y reproducción para la alimentación de la comunidad, contrario a que aquí lo depredan para un consumo que ni siquiera es aprovechado, pues es solo para lucrar en el caso del modus vivendi de los cazadores y para satisfacer un antojo placentero de parte del consumidor.

Ejemplificando la función de algunos animales se refirió a las zarigüeyas explicando que gracias a ellas no estamos cundidos de garrapatas, del Mal del Chagas, no tendríamos un controlador de plagas masivas, por lo que expresó que hasta el más mínimo ser que no es tan carismático tiene un porqué de estar en este planeta.

A respuesta negativa de las autoridades exhortó a que la sociedad entable una comunicación directa con las asociaciones que existen, darle la debida importancia a la fauna, documentarse y pedir que se manejen programas de reciclado de basura, de la preservación del medio ambiente, que se sensibilicen y se empapen más del conocimiento del cuidado de los animales con la responsabilidad de darles un mejor bienestar, no solo tenerlo en una jaula, darle de comer lo que sea y ya, sino conocer su dieta y recurrir a un veterinario o un experto en el tema, investigando por internet y preocuparse por ellos en el sentido incluso de que no estén estresados.

Sugirió aprovechar el parque zoológico La Reina como un centro de educación, que sea didáctico para que se interesen más personas en instruirse con respecto a la convivencia armoniosa con los animales y también con la flora, enseñándole a la comunidad que no hay que depredarlos, sino cuidarlos porque son el atractivo de la región e incluso pueden atraer más turismo para que vengan a disfrutar de ellos observándolos y que conlleve a la derrama económica que tanto se necesita.

En el municipio recalcó que las especies endémicas que más se depredan y están en peligro son el venado, los loros, diversas aves de ornato, las zarigüeyas, el pavo de monte y sobre todo las serpientes en general, pues desde que las ven las quieren asesinar.

Externó que otro riesgo que corren los animales es el comúnmente ser atropellados en las carreteras, ya que muchos sin tocarse el corazón los arrollan como recientemente aconteció con un mono hembra junto con su cría y constantemente sucede esto con los flamencos, por lo que pide que la gente que los respeten y tengan las debidas precauciones porque son seres vivientes que tienen derecho a la vida.

Concluyó que nos informemos más y si observamos un delito de tráfico de animales acudamos a interponer la denuncia ante la Profeco o Semarnat, ya que aunque observemos que no pase nada tengamos en cuenta que ésta ya quedó manifestada y de poco en poco se van a ir acrecentando hasta que se haga algo al respecto porque si no nadie va actuar, también destacó que no compremos especies de la selva para no favorecer a que los sigan depredando y sobre todo que nos eduquemos ambientalmente si queremos un mejor futuro.

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CC