Aviario de Tizimín busca proteger al loro yucateco de su comercialización

En el Aviario Las Yuyas se dedican a cuidar diferentes especies de aves que puedan ser blanco fácil para su captura ilegal, debido al aumento de su venta en el "mercado negro", causando la muerte de muchos ejemplares
sábado, 22 de enero de 2022 · 15:57

Genny Guadalupe Chávez Rodríguez mediante su Unidad para la Conservación, Manejo y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre (UMA), denominado Aviario Las Yuyas, se ha dedicado a cuidar varias especies de aves, entre ellas el loro yucateco, que cada año peligra por ser blanco fácil de las personas que buscan venderlos, además de que la mayoría de sus  polluelos perecen en los incendios.

El objetivo de esta UMA es la reproducción y crianza de las aves en peligro de extinción, en la que el hombre es uno de los principales depredadores y causante de la alteración del hábitat de la vida silvestre, ya que en los últimos años la venta en el “mercado negro” de estas aves se ha incrementado de gran manera, pero muchas mueren durante la trasportación o al ser criadas con métodos no aptos para la salud de las aves.

Chávez Rodríguez resaltó que en los meses de marzo, abril y mayo las personas ubican los nidos de los loros, la mayoría anida en los huecos de los tallos de las matas de palma de huano, en el mes de mayo empiezan a brotar los loros y es momento en que los bajan de sus nidos y los venden al mejor postor en precios que van de los 600 hasta los mil pesos, sin embargo, el índice de muerte es muy alto y nueve de cada diez loros mueren en el proceso de adaptación, muchas veces originado por una alimentación que no es adecuada para el polluelo.

Expresó que cada año mueren incontables loros apenas estando en su etapa de polluelos, las quemas de los montes son el principal factor, porque no hay conciencia y la gente quema los potreros arrasando con los nidos de los loros yucatecos. “Mi objetivo es devolverle un poco a la naturaleza, me duele ver cómo los queman, cómo los roban de sus nidos con fines comerciales, tengo un amigo que trabaja en Sanidad Vegetal, quien me informó que a un ganadero no lo pudieron convencer de que no queme sus potreros porque habían muchos nidos con loros, me pidió que si los criaba los bajaba, desafortunadamente al retornar al lugar ya habían quemado la superficie y habían perecido todas las aves, lograron rescatar las pocas que quedaron, las pájaras en sus mayoría abandonaron los polluelos que murieron calcinados, otras quedaron bajo los troncos quemados aplastados con graves quemaduras, rescataron a cinco, sólo a una no pude salvarle, explico la mujer.

Comentó que las aves deben llevar una dieta muy balanceada en la que se incluyen frutas, verduras, semillas, hojas, cada determinado tiempo se desparasitan, se les da vitaminas y refirió que igualmente varias personas se dedican a rescatar otras aves, pero muchas mueren porque no hay amasanderos y terminan aporreándose en sus propias julas.

El UMA se ubica en la calle 46-A, entre 59 y 61, de la colonia Centro de Tizimín, frente a la escuela Gabino Barreda, ella cuenta con el registro que le permite operar conforme a un plan de manejo aprobado y dentro de los cuales se da seguimiento permanente al estado del hábitat y de las poblaciones o ejemplares que ahí se reproducen y se distribuyen en el aviario, en este pequeño espacio también se cuenta con ninfas y una amplia variedad de pericos australianos.

Síguenos en Google News y recibe la mejor información

CC