Consejo Maya denuncia anomalías en consulta contra granjas porcícolas en Kinchil

Luego de que se llevó a cabo la consulta indígena en Kinchil, Celestún y San Fernando, comisaría de Maxcanú, el Consejo Maya del Poniente de Yucatán Chiki’in Ja’ informó que será mañana miércoles cuando den un posicionamiento consensado sobre los resultados de este ejercicio, así lo reveló Carlos Yamá, integrante de esta agrupación.

El entrevistado comentó que el Consejo decidió darse un descanso antes de volverse a reunir y analizar el resultado obtenido el domingo pasado, donde San Fernando y Celestún dijeron que no le permitían al dueño de la granja porcícola continuar trabajando en su territorio, mientras que en Kinchil el pueblo votó que sí aprobaban la estadía.

Explicó que otro de los motivos por el cual decidieron postergar el anuncio, es que deben reunirse con sus homólogos de Maxcanú para hablar sobre el tema, algo que deben hacer de forma presencial, sobre todo porque la comunicación telefónica con este pueblo es mala, debido a la falta de conectividad con este servicio privado de la zona.

Sobre los números obtenidos en Kinchil, donde 576 personas manifestaron estar a favor de que continúen los permisos, mientras que 423 se opusieron, el entrevistado comentó que el resultado forma parte del proceso, pero señaló que detrás de los que sufragaron para renovar los permisos de las granjas, hay intereses políticos municipales.

“Los 423 votos que tuvimos nosotros por el no, son libres e informados. Los otros no porque hubo una gran operación, incluso, de excandidatos municipales, los cuales maneja Kekén y lamentablemente intentaron ensuciar el proceso”, comentó Carlos Yamá, quien, pese a lo anterior, dijo que todos en Chik’in Ja’ están contentos con el ejercicio.

Señaló que están cansados, pero satisfechos con la participación del pueblo maya, al grado de que la meta era que se gasten las mil boletas que se imprimieron, objetivo que se logró tres minutos antes de que se cumpla el plazo de votación. “La participación de la gente es la que nos tiene muy entusiasmados”, puntualizó el también apicultor.

Sobre quienes votaron a favor de renovar los permisos de las granjas porcícolas de la zona, indicó que, si fueron inducidos o no a votar a favor de estos criaderos, lo importante fue la participación. “Si fueron mal informados o no, participaron y ese es el espíritu de la consulta indígena: que todos participen”, mencionó a través de una llamada telefónica.

Cuestionado sobre si el siguiente paso se daría en bloque, tal y como se realizó la consulta, explicó que todavía no saben qué paso darán, incluso, dijo que  Chik’in Ja’ le notificó a Indignación, que es el organismo que documentó el proceso y el que está acompañando legalmente a estos pueblos, que mañana debían reunirse para tratar el tema.

Alberto Rodríguez Pisté, vocero de Chik’in Ja’ en Celestún, reiteró lo mismo que su compañero, al comentar que el Consejo Maya no ha emitido posicionamiento alguno sobre el tema, debido a que no se han reunido para analizar los resultados de la consulta y será hasta después de esa reunión en que se emita un comentario al respecto.

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El entrevistado, comentó que Celestún fue ejemplo de participación, ya que de las más de 900 personas que participaron, dos menores decidieron votar, lo cual fue consensuado con la gente que hacía fila, quienes fueron las que les otorgaron el permiso para que emitan su voto, lo cual consideró que es una buena señal para las futuras generaciones.

GH