Proponen al 'pueblo fantasma' de Misnebalam en Yucatán como atractivo turístico

Luego del descubrimiento del cementerio, los exploradores consideran que debería convertirse en un atractivo turístico
miércoles, 24 de marzo de 2021 · 13:54

De acuerdo con Juan Miranda y Aarón Novelo, exploradores que encontraron el cementerio de Misnebalam, tanto el camposanto como la hacienda de este “pueblo fantasma”, debería convertirse en un atractivo turístico, que podría “darle vida” nuevamente al lugar.

Entrevistados vía telefónica luego de anunciar su hallazgo en las redes sociales, comentaron que las autoridades correspondientes deberían intervenir en la hacienda abandonada y convertirla en un sitio turístico, con lo cual se preservarían la arquitectura y el camposanto descubierto el domingo pasado.

Sobre su hallazgo, señalaron que tardaron alrededor de tres meses para dar con su paradero y, aunque está cerca del casco de la hacienda, el cementerio está en medio de la selva, descubrimiento que no hubieran podido realizar sin la ayuda de un vecino de Progreso, quien los contactó para decirles más o menos dónde se ubicaba.

Juan Miranda comentó que en la zona pudieron ver venados, osos hormigueros, mapaches, con el temor de que hubiera un depredador que los pudiera atacar.

Por su parte, Aarón Novelo dijo que encontraron 12 tumbas, seis grandes y seis chicas, además de un florero, una placa de, al parecer, la fábrica de ladrillos con la que se construyeron las tumbas y la hacienda, además de que al menos tres bóvedas estaban selladas, por lo que creen que aún están los restos óseos.

El entrevistado señaló que posiblemente haya más personas enterradas en el lugar, ya que había muchas piedras. “Creo que fueron destruidas, pero es algo que yo no puedo asegurar”, indicó el explorador, quien comentó que las tumbas no tenían inscripciones, lo que le llamó la atención. Confesó que su objetivo fue encontrar el cementerio porque le gusta explorar y conocer, además de que esta experiencia fue todo un reto porque, como el lugar está en medio de salva, existe la posibilidad de perderse.

“Todo en la selva se ve igual, además de que hay muchas brechas y desde el aire es imposible notar el cementerio”, comentó.

“Sí teníamos temor porque el domingo nos adentramos más en la selva y no lo encontrábamos, por lo que el riesgo de perdernos era latente. Incluso los ruidos del entorno te espantaban, pero al final fue una experiencia bonita”, comentó Juan Miranda en relación al descubriendo.

SY