Mujeres albañiles, una tendencia que rompe estereotipos en Kanasín

En la actualidad, se siguen viendo casos donde, tanto hombres como mujeres, son señalados por realizar alguna actividad que no “pertenece” al género para el que fue creado, sobre todo en los municipios y zonas rurales, pues los roles están muy marcados; sin embargo, hay mujeres que han sabido sobrellevar la situación e incluso han incursionado en labores que antes se creían exclusivos para hombres.

Tal es el caso de Zaire Alondra Balam Herrera, oriunda de Hunucmá, quien a sus 24 años -y desde hace 9- se dedica a la construcción, remodelación y demolición, así como a otros oficios como es la herrería, la plomería y la electricidad.

“Desde pequeña no me gusta quedarme quieta, me subía a los techos, lavaba tinacos, pintaba casas y cosas así; ayudaba a mis tíos y amigos en sus trabajos y fui aprendiendo poco a poco a hacer tareas más difíciles. Siempre he dicho que los límites se los pone uno mismo, todos somos capaces de hacer todo lo que nos propongamos, sólo es cuestión de echarle ganas para salir adelante”, afirmó.

Balam Herrera comentó que ha tenido algunos problemas para buscar empleo, pues, aunque no es discriminada, muchas empresas no la toman en cuenta por ser mujer.

Ha demostrado que su trabajo está bien hecho y que debe ser considerada como cualquier trabajador, ya que ser hombre o mujer no determina las cualidades.

“Gracias a Dios no me han discriminado por mi trabajo, ni nada de lo que hago; al contrario, tanto señoras como señores me animan a continuar con lo que me gusta hacer, porque sé que hago un buen trabajo de calidad”, dijo.

“Sin embargo, sí me he topado con algunas empresas que, al ir a solicitar empleo, no me toman en cuenta por ser mujer, ya que como es trabajo físico prefieren a un hombre, pero he demostrado que puedo hacerlo igual e incluso mejor que cualquier caballero”, agregó.

Balam Herrera alegó que las capacidades se desarrollan cuando algo realmente te gusta y que no hay impedimentos físicos para realizar cualquier actividad.

“En la empresa donde me encuentro laborando hoy en día puedo decir que me han tratado bien; tanto mis superiores, compañeros y subalternos me han brindado respeto, porque desde el principio marco los límites y pongo en claro que no me dejaré”, afirmó.

Comentó, además, que cuando logre su meta de ser dueña de su propia empresa, le dará la oportunidad a muchas mujeres, sobre todo de municipios, pues asegura que muchas están en la misma situación que ella y no son aceptadas en cualquier oficio simplemente por el género.

Amigos y familiares se sienten orgullos de ella, pues ha logrado posicionarse en un trabajo que se decía ser para hombres y aseguran apoyarla en todo para que siga avanzando y cumpla sus metas.

A pesar de que realiza todo tipo de oficios, lo que más le gusta es la construcción, donde ha demostrado sus habilidades y se ha ganado el respeto de todos.

“Me gusta mucho todo lo que tenga que ver con la construcción, desde la albañilería y todo lo demás. Sé que todavía tengo mucho que dar, y que todas las mujeres podemos hacer todo lo que nos propongamos, seguiré poniendo en alto a nuestro género haciendo bien mi trabajo”, finalizó.

SY