Controlan la plaga de langosta en mil 350 héctareas de Yucatán

Hasta el momento se ha controlado la plaga de langosta en mil 350 hectáreas principalmente ubicadas al oriente de Yucatán, piden reportar los avistamientos.
sábado, 5 de septiembre de 2020 · 09:20

Yucatán es la zona de reproducción de langosta más importante de México y de Centroamérica, ya que se cuenta con aproximadamente 420 mil hectáreas de zonas ideales para que se desarrolle y formen pequeños microhábitats para que pueda copular o depositar y cumplir todo el ciclo, de acuerdo con las estadísticas del Comité Estatal de Sanidad Vegetal de Yucatán (CESVY).

De enero a agosto del 2020 se han explorado 70 mil 519 hectáreas y muestreado 5 mil 100, lo que ha permitido controlar mil 336 hectáreas sobre 132 manchones, 6 bandos y 51 mangas en 11 municipios, beneficiando a mil 364 productores agropecuarios, principalmente de la región Oriente con los controles directos de la plaga, sin registrarse daños en el sector agropecuario.

Freddy Sansores Mena, director del CESVY mencionó que hasta finales de agosto aproximadamente llevaban 1,350 hectáreas controladas y el año pasado, de enero a diciembre, alrededor de 850, por lo que van por muchísimo más, trabajando los municipios de Tizimín, Panabá, Sucilá, Buctzotz, Cenotillo, Tunkás, Tekal de Venegas y Espita en la zona Oriente y, en la parte Sur, en Akil, Oxcutzcab y Ticul, así como en los límites con Campeche.

Productores al pendiente

En el caso de José Salinas Alcocer, encargado del rancho Pool Balam que se ubica en la carretera Sucilá-Buctzotz en el km. 3 del tramo que conduce hacia la comunidad de San Francisco, compartió que arreando a sus animales encontró langostas en la maleza del potrero, por lo que procedió a reportarlas para que sean controladas.

“Hemos escuchado que en otros ranchos las han visto, a nosotros nos sorprendió porque aún no es la época, pero como desde hace varios años reportamos para que se fumigue a tiempo, lo hicimos de inmediato” narró el vaquero.

Lo anterior lo señaló consiente de la importancia de eliminarlas desde muy pequeñas, ya que en otros años han arrasado completamente con toda la vegetación y generado grandes pérdidas para este rancho de 20 hectáreas que se dedica al cultivo del maíz y del pasto guinea y tanzania.

“Hay que sumar esfuerzos para luchar contra la langosta que es una plaga devastadora para los cultivos, por lo cual, tanto los propietarios como los encargados de los ranchos o parcelas, si las detectan en sus tierras deben reportarlas y evitar que se convierta en una plaga extremadamente dañina para el campo yucateco”, aseveró.

Expuso que existen sitios a los que no pueden ingresar pues es puro monte y no hay caminos; sin embargo, los productores los recorren todos los días y por ello les piden que si las detectan las reporten y proceden al control, ya que al hacer caso omiso pueden dar lugar a que proliferen y se transformen en grandes mangas que devoren varios cultivos.

Clima propicio

A las pocas horas del reporte arribó personal del CESVY, quienes procedieron al control químico preventivo para eliminar langostas en su etapa de saltonas y así evitar que posteriormente puedan moverse a otras áreas; es importante mencionar que tras el llamado detectaron previamente el lugar donde se encuentran para acudir exactamente al sitio para aplicar la “Cipermetrina”, insecticida con menor impacto ambiental para matar a estos insectos.

Mario Antonio Poot Pech, coordinador del programa de langosta explicó que las ninfas o saltonas pasan por 5 etapas y conforme vayan aumentando en tamaño también asciende a la par su consumo de materia vegetal, indicando que lo máximo es de 2 gramos por día, por lo que una manga pequeña en promedio sólo en que llegue estarían comiendo alrededor de 6 toneladas de materia vegetal, mientras que una grande puede consumir hasta 30 toneladas.

Externó que de 3 a 4 semanas las langostas ya son adultas, que tienden a reunirse y moverse y que como plaga pueden impactar en tres etapas: la primera cuando se forma el brote entre los pastos en la zona ganadera, la segunda que surge posteriormente si no se controla y pudiera invadir a los cultivos y por último la etapa 3 en la que pueden llegar a la ciudad.

Añadió que la región se encuentra en la etapa 1 porque se ha realizado el trabajo preventivo con antelación y desde pequeños estos insectos se están controlando. Recordó que hace 80 años no existía una campaña de seguimiento, se formaba la manga y causaba grandes afecciones.

Enfatizó que por fortuna México es un referente en todo el mundo en el manejo preventivo, conscientes de que es una plaga cíclica que se presenta cada determinado año, puntualizando que Yucatán tiene todos los años en que se presenta en diferentes intensidades, pero que se da un marcado y fuerte comportamiento cada 4, debido al factor detonante de que tiene dos generaciones al año y en cada uno de ellos se multiplica y cuando llega al año 4 alcanza su pico.

A esto se le añade el cambio climático, como en esta temporada en que hubieron las inundaciones de “Cristóbal”, “Amanda” y la Tormenta Tropical No. 3, que con siete días de intensa lluvia dio pauta a que el suelo fuera ideal para que la langosta oviposite —ponga sus huevos debajo del suelo y que este húmedo—, aunado al calor que predomina que también se convirtió en factor que favoreció a la langosta, porque acortó su ciclo, ya que para llegar a adulto si necesitaba dos meses con este factor lo hace en mes y medio, volviendo a la plaga más peligrosa. Estas son algunas variables que intervienen y mencionó que la región se encuentra en el año 2.

Posteriormente realizaron muestreos de diferentes ranchos de la zona, dando a conocer que este consiste en recorrer los potreros para determinar la cantidad de langostas que se focalizan por metro cuadrado, ya que de 1 a 10 se contempla que su nivel de presencia es bajo, de 11 a 29 medio y en ambos casos se mantiene en vigilancia, mientras que de 30 para arriba se determina que es alto y de infestación y que ya requiere control.

Añadieron que por la gran presencia de saltonas en esta región el monitoreo a cargo de los técnicos ya se hace a diario para detectarlas y actuar oportunamente, ya que antes se hacía cada 15 días, añadiendo que las langostas, dependiendo de la etapa en la que se encuentren, pueden abarcar desde 5 hasta 50 metros cuadrados y hasta medio kilómetro en su etapa 5.

Realizan el control químico por lo general, pero donde existen apiarios se realiza el control biológico para no afectar a las abejas aplicando el hongo denominado Metarhizium Acridium para eliminarlas.

Versiones

Mario Antonio Poot Pech indicó dijo que la especie es comestible y una buena fuente de nutrientes, que también son llamadas dientes del viento y que son consideradas, según las creencias, la maldición a las personas que se portaron mal pues se les dotó del pecho de un toro, cabeza de un águila, el cuerpo de una serpiente y dio como resultado la langosta.

Mientras que en el Popol Vuh se cree que es una maldición que enviaron los dioses porque un hijo se portó mal y para castigarlo envió la langosta para que no se alimenten por el resto de sus vidas del maíz.

Por Luis Manuel Pech Sánchez