Pemex descarta explosión de ductos por huachicol en Yucatán

El Departamento de Inspección Física de Pemex señaló que en Yucatán es mínimo el riesgo de explosión en los ductos de combustible que pudieran derivarse del huachicol.
martes, 29 de septiembre de 2020 · 08:38

En Yucatán es mínimo el riesgo de explosión en los ductos de combustible que pudieran derivarse de los problemas de huachicol, ya que se cuenta con un adecuado sistema de seguridad y vigilancia, aseguró el Departamento de Inspección Física de Pemex en Yucatán.

Javier Rodríguez, inspector de vigilancia, indicó que los ductos están ubicados de manera estratégica en zonas donde no hay asentamientos humanos y la propia ley prohíbe que se edifique alguna construcción cercana a los ductos.

Añadió que se cuenta con un sistema de monitoreo a distancia e inspección física de los más de 50 kilómetros de ductos. Detalló que se cuenta con un monitoreo con el que, a través de un software, se puede detectar cuando hay una baja presión en algún punto de la red y que podría dar pie a una posible toma clandestina.

Dijo además que cada semana el personal de vigilancia física realiza recorridos para verificar que todo esté en orden; sin embargo, la labor se complica porque gran parte del derrotero está dentro del monte, zonas de difícil acceso.

Más del 85 por ciento de las tomas clandestinas que se han ubicado en Yucatán han sido dentro del monte, es decir, entre el tramo de Komchén a San Ignacio, lo que es considerado como el foco rojo.

En Mérida, por donde cruzan los ductos sólo se ha detectado una toma clandestina en un lote baldío en la colonia El Porvenir. En Progreso, en los últimos dos años, han sido detectadas cuatro tomas clandestinas en predios particulares, gracias a denuncias ciudadanas y por medio de la vigilancia a distancia.

El último de ellos se registró el fin de semana en un predio donde se preparaba la ordeña de los ductos.

Por su parte, la Coordinación Estatal de Protección Civil indicó que la vigilancia es un tema de orden federal que le compete a Pemex.

Por David Chan Caamal