Cochinita pibil enterrada, una deliciosa tradición

“Es un gusto y una gran satisfacción haber aprendido a cocinar platillos yucatecos, tradición que viene desde mis abuelos, como se sabe, desde los 11 años a las niñas las van involucrando en las tareas del hogar y qué mejor que la elaboración de los alimentos”, dijo María Antonia Yam Chi, cocinera del restaurante “Zamná”: que aseguró está orgullosa de sus raíces mayas.

Aun cuando sabe cocinar todos los platillos yucatecos, consideró que la cochinita pibil (enterrada) es uno de los más deliciosos porque el olor a humo le da un sabor diferente.

Explicó que, en temporada de lluvias como la actual, muchos dejan de elaborar la cochinita pibil enterrada porque es un poco peligrosa desenterrarla, porque el bochorno se va sobre la persona y puede ocasionarle enfermedades.

Por otra parte, dijo estar orgullosa de formar parte del reconocimiento internacional que recibió el restaurante donde labora, porque gracias a todos los que conforman la base de la empresa son personas indígenas que ponen en alto el prestigio de nuestro Estado y, como ella, varios tuvieron buenas experiencias el año pasado, como ejemplo, dijo que estuvo en una degustación de agentes de viajes que se llevó a cabo el mes de agosto en el Estado de Sonora, quienes quedaron maravillados con los guisos yucatecos.

Reconocimiento

Anteriormente participó en otros eventos como el Encuentro de Pueblos Mágicos en Pachuca, Hidalgo, donde reconocen la calidad de la gastronomía yucateca, especialmente cuando las personas se acercan y nos preguntan cómo se elaboran nuestros guisos regionales como los panuchos, los salbutes, la cochinita pibil, el relleno negro, el queso relleno y el poc-chuc.

Ella es originaria de Sitilpech, donde hay gran devoción por el Cristo Negro en una zona ganadera, donde también se aprecia mucho el chocolomo y el mondongo.

La propietaria del restaurante “Zamná” de Izamal, Luz María Sosa Garma, ganadora del reconocimiento Traveller Choise 2020, como POR ESTO! publicó ayer, dijo que la pandemia del coronavirus nos ha castigado bastante, pero el mejor mensaje que puedo enviar a los restauranteros de Mérida y del Estado es que no claudiquen y traten de sacar adelante sus establecimientos a pesar de las restricciones sanitarias.

Explicó que, debido a la pandemia del coronavirus, las ventas del sector alimentos bajaron considerablemente, sobre todo durante el tiempo de confinamiento de marzo, abril, mayo y parte de junio, cuando se les permitió reabrir, pero con ciertas limitantes.

El mejor horario

En su caso, la empresa decidió operar sólo de 12 del día a las 17 horas por considerar que es el mejor horario para el ramo que maneja, es decir, la comida regional de nuestro Estado.

Agradeció el apoyo de su personal por el esfuerzo que realizan todos los días para mantener el sazón de cada uno de los diferentes guisos que frecen a los clientes, especialmente las tortillas hechas a mano.

Con tan sólo cinco años en el mercado me siento contenta de que los visitantes que acudieron a mi restaurante durante el año pasado, hayan comentado para que su empresa recibiera un premio tan importante, lo que habla de la calidad y el prestigio de la comida yucateca entre el turismo que llega a nuestro Estado y al que buscan complacer poniendo énfasis en la elaboración de los platillos.

Por Víctor Lara Martínez

Por Redacción Digital Por Esto!

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