Temporada de pulpo arranca con dificultades en Progreso

De las 150 embarcaciones que pretendían salir a la mar, solo el mitad pudo hacerlo tras cumplir con los requerimientos sanitarios por la contingencia sanitaria por COVID-19
domingo, 2 de agosto de 2020 · 09:48

De las 150 embarcaciones pesqueras que pretendían zarpar el primer día de la temporada de pesca de pulpo, menos de la mitad salieron del Puerto de Abrigo de Yucalpetén, ya que la mayoría no ha obtenido el despacho de salida porque no han cumplido con los nuevos requerimientos sanitarios que marcan las autoridades portuarias por la pandemia del COVID-19.

En el primer día de la temporada de pulpo salieron unas 70 embarcaciones, mientras que las autoridades portuarias negaron la salida al menos a seis por no cumplir con las nuevas disposiciones sanitarias, mientras que el resto aún no termina con la documentación para su despacho.

Además de las nuevas reglas sanitarias que afectan el inicio de la temporada de pulpo, ninguna de las cien embarcaciones ribereñas de pescadores de pulpo salió de la caleta de Progreso, debido a que el costo de la carnada es casi el doble del precio del pulpo, por lo que no es rentable para los pescadores.

Entrevistado en la Marina de Yucalpetén, Rogelio Chablé, quien trabaja en una de las embarcaciones industriales de pulpo, señaló que la gran mayoría de los barcos no han salido porque están haciendo los movimientos para cumplir con las nuevas medidas por el COVID-19.

Señaló que muchos patrones ya habían pagado anticipo a los 18 tripulantes, pero sólo se permite que salgan 14 y a varias embarcaciones no se les permitió salir.

Jueves o viernes

La mayoría aún están haciendo sus movimientos para cumplir con las medidas, avituallando de los barcos y alistando las líneas para salir jueves o viernes, hasta el momento no han dicho cuánto se va a dar de anticipo, pero con el COVID-19 está muy rebajado, ya que sólo están dando 6,000 pesos por 20 días de pesca.

Cada patrón está eligiendo a 14 pescadores por barco, a quienes se les toma la temperatura antes de abordar la embarcación, indicó.

Una situación más complicada se vivió en el primer día en la temporada de pesca de pulpo en la Caleta del Puerto de Progreso, donde ninguna de las más de cien lanchas salieron debido a que el precio de la carnada cuesta el doble del precio del pulpo y aún no es costeable para los trabajadores de la captura ribereña.

La difícil situación que enfrentan los pescadores ribereños por los efectos de la contingencia sanitaria COVID -19 se complican por la escasez de especies de pescado de escama, además de que los costos del combustible y el mantenimiento de los motores de las embarcaciones elevan el costo de sus operaciones.

Escasea el okol

El patrón de embarcación José Pech señaló que, por ahora, nadie quiere salir a pescar pulpo, ya que el cangrejo que se utiliza de carnada conocido como okol está muy escaso y se disparó su precio de 70 a 75 pesos el kilo, cuando el pulpo ahora se paga a 40 pesos, señaló.

Sólo para pagar el combustible de la lancha y el aceite del motor tienes que sacar 40 kilos de pulpo, por lo que el costo de la carnada es lo que hace que no sea negocio la pesca de pulpo.

Por eso, aunque inició la temporada de pulpo, salieron a pescar mero que se paga a 60 pesos y sólo lograron unos 60 kilos, es más rentable que salir a pulpear, pero así es el trabajo del pescador, a veces sale para la gasolina y otras veces no, ésta es la suerte del pescador, comentó el dueño de dos embarcaciones ribereñas.

Ahorita sí la estamos viendo difícil, porque con la pandemia sanitaria la economía está muy dolida y el pescado ya no hay como antes porque estamos acabando con el producto, indicó el hombre de mar.

–Por su parte, el pescador Jorge Ramírez Amador, quien regresaba de viaje, dijo además que no conviene salir a buscar el pulpo porque la pesca estuvo muy baja, ya que sólo gano cien pesos y el pescado para la frita de la casa.

Aunque hoy no hubo buena pesca, al menos salió para la comida luego de estar todo el santo día bajo el sol, pero hay que agradecer que, aunque sea poco, salió para comer, porque creo que ahora con la enfermedad del virus hay gente que está más amolada, indicó.

En la Caleta, nada

El patrón de embarcación Rudy Dzul coincidió en que no hay precio bueno para salir al pulpo, ya que la carnada está escasa, por lo que casi cuesta el doble del precio del pulpo y por esto ninguna lancha de la Caleta salió a pulpear.

Señaló que la carnada que se utiliza son los cangrejos conocidos como okol y maxquil, además de la jaiba, sin embargo, toda la carnada está escasa o no hay, el pescado está barato pero conviene más.

El pescador Santos Cob dijo que sólo ganó 150 pesos el día.

Jorge Antonio Dzib, dueño de lancha, dijo que en su caso no logró sacar los 1,100 pesos que le pone de gasolina a la embarcación, agregó que son más de 300 familias las que se ven afectadas por los bajos precios del pulpo, ya que son como cien lanchas y cada una sale con dos alijos.

Agregó que espera que en la semana se nivelen los precios y sea más rentable salir a pescar el pulpo, desafortunadamente ya no hay más ayuda, sólo al principio de la cuarentena nos apoyaron, pero eso ya se gastó, comentó.

Las jimbas

En la Caleta sólo la embarcación “Herberth Francisco” puso sus jimbas, que son los troncos de bambú que se utilizan para tirar el cordel donde se pone el cangrejo de carnada, pero ni siquiera la terminaron de armar y tampoco salió.

La temporada de pulpo se abrió hoy, pero no hay precio, confirmó el pescador Víctor Manuel Mendoza Salazar, de la embarcación “Luis José”.

Por su parte, la señora Alejandra Méndez, quien trabaja como gaviotera desde hace 25 años en la Caleta, dijo que está postrada en la silla de ruedas desde hace más de 30 años y hasta el momento nunca ha recibido ayuda de las autoridades, sólo ha salido adelante con la ayuda que le dan los pescadores.

Por eso cuando a ellos les va mal nos va mal a todos en la Caleta, pero con lo que me hicieron el favor de regalar calculo ganar unos 40 ó 60 pesos, señaló la mujer de 56 años de edad.

Por Alejandro Moreno Peña