Recuerdan la historia del béisbol en Tizimím

Tizimín.- El béisbol es un deporte de antaño que desde los inicios del municipio a la par fue creciendo con él; sin embargo, su mayor auge e impulso y en el que surgieron los ídolos y los mayores logros en esta disciplina fue en la década de los sesentas en la denominada época de oro del rey de los deportes en Tizimín.

La catedral por excelencia de este deporte era como hasta hoy el campo deportivo Dr. Juan Rivero Alonzo, donde se escribieron grandes anécdotas y batallas llenas de poderío, entrega y euforia pero, sobre todo, pasión por la pelota caliente. “Tizimín siempre ha sido una potencia en el beisbol”, esto fue lo que compartieron Vicente “la Muralla” Díaz Aguiar y Carlos “Cañón” Castillo, narrando que en 1960 inicia el equipo H. Ayuntamiento que perduró hasta el 68, cuando surgieron los Tábanos de Tizimín, que año con año en su participación en la liga oriental, si no era campeón, era finalista, y por tanto obtuvieron entre 4 o 5 campeonatos en esta liga.

Posteriormente en el año 1971 dio inicio la Liga Mayor Estatal y Tábanos de Tizimín ingresó a ella en 1972, donde también solían ser finalistas o conquistaban campeonatos, como el del 73 y el del 74. Recuerdan que cuando los Tábanos jugaban en su campo, por la gran cantidad de afición se implementaban gradas, porque con las que contaba el campo no eran suficientes para albergar a tanto adepto que apoyaba al equipo tizimileño y por tanto era muy difícil que les ganaran un juego en casa. Indicaban que en ese tiempo el béisbol era la única diversión y distracción de la gente, por lo que los partidos eran muy esperados los domingos y que incluso hoy por hoy perdura como una gran fuente de entretenimiento en las comisarías del municipio, una fiesta de la afición y una gran satisfacción. 

Mencionaron que Tizimín tenía a sus ídolos andando en las calles, algunos de ellos son Vicente “Muralla” Díaz Aguiar (3B), Alvar Peniche (SS), Hernán “Polvorita” Domínguez (2B), Chivo Luna (1B), Gilberto Farjat (C), Rafael Sánchez “Kirico” (JI), “Ratón” Romero (JC), Iván Bates y Fedín Conde (JD), pitcheando Armando Díaz y Pablo Güémez, así como Juan Duarte, “Perucho” Cáceres (C) y Manuel Bates (P). “Muralla” Díaz recordó una anécdota acorde entre una conversación entre refuerzos tizimileños de la capital del estado, cuando a “Escopeta” Pacheco le preguntaron por Ramiro Rubio y “Dumbo” Muñoz ¿a dónde iba? y él respondió que iba a reforzar a Tizimín, por lo que le puntualizaron que para venir al municipio como tal debía jugar mejor que los locales, sino no era considerado refuerzo. 

Ahora compartieron que los únicos que continúan vivos son Iván Bates, Wilberth Rodríguez, el Prof. Eduardo Echeverría, Pablo Güémez y Vicente Díaz Aguiar. Otra de las anécdotas fue una gran hazaña cuando dos grandes leyendas del pitcheo Armando “Zurdo” Díaz de Tizimín se enfrasco en un duelo contra el “Fantasma” Rosado, pitcher de 1907TIBEIS10 En 1968 surgieron los Tábanos, acostumbrados a pelear el título cada año.

Colonia Yucatán en un juego regular en el que ambos lanzaron 19 episodios, ganando Tizimín con 9 carreras a 7 donde el cátcher fue “Mundo” Canto de Colonia Yucatán.

Externaron que Tizimín siempre tenía una gran rivalidad deportiva con Colonia Yucatán, con Valladolid y con Oxkutzcab, jugando cada encuentro con gran pasión que se desbordaba como si se tratase de una final. Los Tábanos de Tizimín, que aproximadamente dijeron adiós en el año 2000, contaron con grandes figuras.

Como parte de su historia le ganaron con tres partidos a 0 la serie final a Oxkutzcab, pitcheando Carlos “Cañón” Castillo en el año 1973. Posteriormente “Cañón” Castillo en el 74 se fue a la Ciudad de México a continuar sus estudios y ahí fue destacando hasta ser parte de la Selección Nacional que lo llevó a competir en 1979 a los juegos Panamericanos celebrados en Puerto Rico; dada su buena actuación fue seleccionado nuevamente para competir en el mundial de beisbol amateur celebrado en 1980 en Tokio Japón, a su regreso a Yucatán en el 94 se integró a la Maquina Roja donde obtuvieron dos segundos lugares en la Liga Estatal de Yucatán y en la liga de la Costa. 

Su apodo de Cañón derivó a que lanzaba por arriba de las 88 millas, pese a no tener una estatura alta como muchos de los pitchers que requieren de ese desarrolló físico para alcanzar esa potencia de tiro; él dejó de jugar en el 2017 a los 63 años y ahora es el coordinador de beisbol municipal. Mientras que Vicente la “Muralla” Díaz Aguiar atribuye su seudónimo a que como tercera base en cada partido no dejaba pasar bola alguna, por lo que era un titular indiscutible. A sus 56 años dejó de jugar en el 2002.

Al igual que “Cañón” Castillo, han sido reconocidos por algunas administraciones como grandes peloteros del municipio y para ambos el beisbol es la vida misma a la cual agradecen por haberles permitido disfrutar con salud de este deporte por muchos años. 

También recordaron a Antonio Tono Turriza, un jardinero central que atrapaba hasta las bolas que parecían imposibles de detener, por lo que también se convirtió en una leyenda de los 70s.

El máximo jonronero fue Gilberto Farjat, seguido por Iván Bates, Alvar Peniche, Litos Alcocer y Chucho Gutiérrez; otro tremendo bateador fue el “Chino” Luna. A raíz de la desaparición de la Maquina Roja —porque no se volvió a jugar una liga estatal— surgieron la Liga Campesina, así como la Liga Municipal, que permanece vigente hasta la fecha con su modalidad de primera fuerza.

El beisbol recobró su auge en Tizimín durante la temporada 2014-2015, surgiendo los Reyes de Tizimín, que participaron en una Liga Estatal, posteriormente se integraron a la “Naxón Zapata” en septiembre del 2015 por invitación del IDEY.

El Alcalde Jorge Vales inició como su representante al ser equipo del Ayuntamiento, Reyes Aguiñaga fue uno de sus primeros patrocinadores, entre otros conocidos comercios y bajo la dirección del director deportivo Raúl Monforte Osorio se encaminaron hacia su travesía beisbolística, su primer mánager fue Carlos “Cañón” Castillo Sus primeros jugadores más destacados fueron Yahir Medina, Yahir Barrera, Miguel Herrera y Dustin Heredia como pitcher; Carlos “La Lora” Sansores como receptor, junto con Carlos Pisté.

También contaba con jugadores de la Zona Oriente representados por “La Chaya” Fernández en tercera base, Edu Briceño, los doctores de Temozón Hugo y Dante Arjona, así como el novato Carlos Silva.

Llegaron hasta playoffs y perdieron contra Tiburones de Progreso, quedando entre los seis mejores equipos de la liga.
En la siguiente temporada se coronaron campeones ganándole con 5 carreras a 2 a los Forasteros de Izamal, contando con Manuel González en el pitcheo, Miguel Herrera y Dustin Heredia, en bateo con Mario Lavagnino, Carlos Pisté, “La Lora” Sansores como receptor, Yahir Medina, Edu Briceño y Fernando Alejos. En la tercera temporada se convirtieron en subcampeones cayendo en la final con 5 carreras a 4 contra Castores de Mérida en el parque Kukulcán. Contaban con el pitcher de Sinaloa Alfonso Pulido, Miguel Herrera, Dustin Heredia, Alex Rivero —guante de oro en la Liga Mexicana como paracorto—, “La Chaya” Fernández en tercera base, Luis “Vampiro” Borges — ex jugador de Liga Mexicana— en segunda y César Caamal como receptor y primera base. 

En la cuarta temporada llegaron a semifinales siendo derrotados por los Constructores de Mérida con los mismos integrantes y novatos del Oriente, como Antonio Díaz y Yahir Barrera. En la quinta temporada llegaron hasta las semifinales siendo derrotados por Holbox; los ReyesEn la cuarta temporada llegaron a semifinales siendo derrotados por los Constructores de Mérida con los mismos integrantes y novatos del Oriente, como Antonio Díaz y Yahir Barrera. En la quinta temporada llegaron hasta las semifinales siendo derrotados por Holbox; los Reyes tenían como pitcher al dominicano Danilo de Jesús y los jugadores de base.

Antes de la contingencia, los Reyes ingresaron a la Liga Oriental de Beisbol donde ya había seis equipos participantes de la región, pero todo se suspendió pues inicio la pandemia. Se rescató la modalidad de jugar con el bate de madera como en los tiempos de antaño.

Se logra captar a más afición, e inspirados por estos monarcas surgieron los “Reyecitos” que hasta hoy continúan como campeones de una liga infantil estatal, además de que han destacado en varios campeonatos de la entidad. También es de reconocerse a los grandes equipos que han emanado de las comisarías y que participan en la liga municipal de beisbol, ellos protagonizaban grandes encuentros en sus respectivos campos de sus comunidades manteniendo vigente y de la preferencia de gran parte de los habitantes al beisbol que hoy por hoy realmente en Tizimín hace honores a su sobrenombre como el rey de los deportes de este municipio con grandes jugadores y con gran afición beisbolera.

Por Luis Manuel Pech Sánchez