Por COVID-19 cancelan vaquerías en Tizimín, serán virtuales

Serán transmisiones pregrabadas de grupos jaraneros con diferentes orquestas y charangas.
miércoles, 30 de diciembre de 2020 · 11:52

La tradicional vaquería que enmarcaba el inicio de la Feria de Reyes también será suspendida a causa de la pandemia, quienes acostumbraban asistir a ella sólo podrán disfrutar desde sus hogares de una transmisión virtual a través de las redes sociales del Ayuntamiento, donde se presentarán bailables de grupos jaraneros y recuerdos de ediciones pasadas.

Elmer Díaz Ruiz, administrador de la Feria de Reyes, recordó que se suspendió junto con sus actividades para evitar la proliferación de contagios de coronavirus, sin embargo, informó que el Ayuntamiento ha preparado este 30 de diciembre transmisiones pregrabadas de grupos jaraneros con diferentes orquestas y charangas, así como recuerdos de lo que se vivía en esta fiesta llena de algarabía, diversión y mucho ambiente regional al ritmo de la jarana, en dichos videos también se recordará lo que se disfruta en la feria. Las transmisiones se realizarán en la página del Ayuntamiento en cápsulas de aproximadamente 15 minutos, a las 12 del día, 2, 4 y 6 de la tarde, concluyendo con la de las 8 de la noche.

De dónde viene la vaquería 

El historiador Luis Pérez Salazar compartió que, aproximadamente en el siglo XIX, nació la vaquería, denominada así porque provenía de la palabra vacas, ya que había toros que se lidiaban en las corridas y de ahí derivó dicho nombre alusivo a que hay fiesta de toros en honor a los santos patronos.

Explicó que surgió de la conjugación de sonidos y movimientos de las danzas mayas en fusión con la jota aragonesa, un bailable típico de España y de ahí derivan los zapateos que embellecen las estampas yucatecas.

Recordó que se hacía en el Palacio Municipal, ya que no había feria en el centro de la ciudad antes de 1902, pero cuando ésta comienza a realizarse en este sitio en 1910 se instalan juegos mecánicos y se tienen que realizar en el mercado, que estaba situado en lo que hoy es la explanada del exconvento hasta alrededor de 1924, después de la fundación de la Recreativa Popular el 27 de abril de 1923, que fue sede por muchos años de esta fiesta del pueblo, aunque en ella también se realizaban grandes bailes, posteriormente, hace como 15 años, se trasladó al jaranchac al lado del Chemulpo, hasta que entre el 2004 y el 2007 se volvió a celebrar como hasta hoy en el centro de la ciudad.

Expuso que la vaquería es una tradición de antaño en la que se corona a la reina de la feria, en la actualidad este título está a cargo de Pamela Guadalupe Arceo Gómez; es una verdadera fiesta del pueblo que congrega a los mejores exponentes de la jarana de distintos Estados del país, un punto de diversión lleno de tradiciones, costumbres y mucha cultura que pone a Tizimín en los ojos del mundo.

En ella la gente pone de manifiesto su entusiasmo y alegría en todo momento, mientras que la mayoría baila, los demás admiran a los máximos exponentes de la jarana, aficionados que acostumbran acudir a las vaquerías que se organizan en cada feria del Estado, quienes en cada serie musical cosechan aplausos y ovaciones del público que se congrega para apreciar sus bailables a los que les imprimen lo mejor de la jarana yucateca.

La siembra del ceibo también se extrañará

Al no haber vaquería tampoco se hará la tradicional siembra del ceibo que, según las costumbres, su recorrido hacia la plaza de toros inicia a las 2 de la madrugada del 31 de diciembre.

Pérez Salazar explicó que el ceibo es el signo sagrado de la creación del mundo, de la vida en las fiestas taurinas que enmarcarán la Feria de Reyes y que su presencia, según las creencias, es la que se encarga de velar por la seguridad de los que participan en las corridas dándole buena vibra a los toreros, al público y a todo aquel que se hace presente en el coso artesanal.

Narró que en el recorrido de la tradicional siembra del ceibo (yaxché) cientos de personas lo acompañan desde el centro de la ciudad coreando eufóricos y al unísono las palabras ¡Ceibo, Ceibo!, que es encabezado por las autoridades municipales, la reina de la feria, algunos diputados de feria, en hombros de varios tizimileños que entre relajo y algarabía lo cargan conduciéndolo hacia el coso taurino.

Durante el derrotero la algarabía, los gritos, los bailes de jarana, el tronar de los voladores y la emoción por cargar este árbol se pone de manifiesto en todo momento, a su llegada al coso taurino el contingente que acompaña al ceibo al compás de la música de la charanga, redondea la plaza saludando a la gente que abarrota los palcos de los tablados para posteriormente realizar su tradicional siembra, el enorme árbol por su peso y tamaño les dificulta erguirlo a quienes lo cargan; sin embargo, logran su cometido y de manera imponente luce en todo su esplendor dentro del redondel, finalizó exponiendo que este año extrañaremos esta tradición, pero existe la confianza de que vuelva a cobrar vida en la próxima edición de la Feria de Reyes.

Jaraneros que nunca fallan a las vaquerías, como el maestro Héctor Rolando Pech Dzul, manifestó estar muy triste por su cancelación, ya que desde que tiene memoria no ha fallado a alguna, pues su presencia en ella para bailar es como una promesa de fe, ya que antes de acudir a ella asiste al santuario ya vestido como jaranero y hace reverencia a las imágenes de los Reyes Magos, por lo cual reveló que le genera una nostalgia inmensa que este año no pueda desarrollarse, aunque es para cuidar la salud de los habitantes y de los visitantes, por lo que espera que esta pandemia pase y deje de frenar nuestras tradiciones y costumbre arraigadas.