Hunucmá se mantuvo en calma pese a las lluvias de Zeta

Pobladores de Hunucmá y municipios ubicados al poniente del estado manifestaron su tranquilidad al enterarse de la degradación del fenómeno.
miércoles, 28 de octubre de 2020 · 12:12

Sólo sustos y lluvias dejaron los efectos del Huracán Zeta, degradado a Tormenta Tropical durante el martes; tanto en la cabecera municipal, como en las comisarías de este municipio, informaron las autoridades.

Ante la amenaza del huracán categoría 1, las lluvias con mayor intensidad comenzaron a sentirse por la mañana, minutos después de las 08:00 horas, aunque durante la madrugada de este martes llovió, pero sin consecuencias.

Los habitantes tuvieron temor de que la población se inundara, tal como ocurrió con el paso de la Tormenta Tropical Cristóbal, y el Huracán Delta, sin embargo, el día se mantuvo en una calma relativa.

A pesar de ello, personal de Protección Civil, y de la Policía Municipal, al mando de Jesús Bote Manrique, y Miguel Castillo Chan, respectivamente, estuvieron pendientes de la evolución del fenómeno, principalmente en el puerto de Sisal, donde implementaron diferentes medidas de prevención.

El Gobierno Estatal envió a esta ciudad seis autobuses, en caso de evacuaciones; tres de los cuales fueron enviados al puerto sisaleño, y los demás se quedaron estacionados sobre la calle 30, frente a la Escuela Primaria “Serapio Rendón”, donde se instalaría uno de los principales refugios, pero no hubo necesidad porque todo se mantuvo en calma.

El funcionario reconoció que, en caso de las afectaciones por las lluvias provocadas por la tormenta, se agravaría el caso de la inundación de la carretera Hunucmá-Sisal, donde se reportó un incremento considerable en el nivel del agua de la ciénaga, que mantiene inundada dicha vía.

En las colonias Baltasar Ceballos, Ricardo Flores Magón, San Vicente, Guadalupe, Guadalupe II, Lourdes, Fátima y Lázaro Cárdenas, entre otros puntos, que durante el paso de “Delta”, se inundaron casi en su totalidad, los vecinos se mostraron temerosos de que este problema se repitiera.

Las lluvias trastocaron actividades que se desarrollan en el Mercado Municipal, además de que inundaron varias calles, que comúnmente sufren este problema cada vez que llueve.

Temporal intenso y ráfagas de viento por la tarde

Cuando parecía que las lluvias por la tormenta Zeta, habían pasado de las costas y poblaciones del poniente del Estado de Yucatán, a las 19:30 horas de este martes se registró una intensa lluvia.

La precipitación estuvo acompañada con ráfagas de viento.

Las personas se encerraron en sus domicilios para resguardarse, esperando que mañana el clima mejore.

La Comisión Nacional del Agua reportó que las bandas nubosas del ciclón, ocasionaría lluvias con tormentas y vientos de 50 a 60 kilómetros por hora en ciudades como Progreso, Mérida, Celestún, Maxcanú, Seyé y Tecoh.

Tranquilidad ante la degradación

Pobladores de Kinchil, Celestún, Tetiz, Hunucmá y Sisal expresaron su alegría al enterarse que el Huracán Zeta se degradó a tormenta tropical al entrar a tierras yucatecas, ya que muchas familias aún no se recuperan de las pérdidas que tuvieron con el paso de Gamma y Delta.

La señora Genny Cool, vecina de la colonia Guadalupe, de Hunucmá, comentó que: "Con el paso del Huracán Delta, por las inundaciones causadas por las lluvias, la pasamos muy mal".

"Se murieron los animales domésticos, las gallinas que estaba criando para vender en estos días de las fiestas del Hanal Pixán, eso sin tomar en cuenta las pérdidas de algunas de nuestras pertenencias y daños en nuestras casas, por eso con la llegada de Zeta estábamos muy preocupados, pero al parecer sólo provocó lluvias ayer martes, que sí nos perjudican, pero no tan gravemente como cuando las calles y predios se inundaron", señaló.

Por último, dijo que las calles 30 entre 51 y 52, de la colonia Guadalupe, se convierten en una enorme piscina que inunda todo, incluyendo las casas habitación.

Por su parte Silvia Cool, de la colonia Tres Reyes al Oriente de la población, comentó: “Amaneció nublado y pensé que iba a llover recio, aunque tenía la esperanza de poder trabajar en el puesto de venta de pollos en el mercado, pero con el paso de los minutos comenzó a caer un fuerte aguacero que obligó a todas las vendedoras del mercado a cerrar sus establecimientos y retirarse a sus hogares”.

Desde las 8:30 de la mañana cayó la lluvia de manera continua e intensa sobre poblaciones del Poniente del Estado como Kinchil, Tetiz, Hunucmá, Celestún y Sisal, donde las actividades comerciales prácticamente fueron suspendidas, y sólo los comercios que venden productos de primera necesidad abrieron sus puertas.

Por Ramón Reyna Fernández / José Luis López Quintal