Día del médico: En Valladolid la ética los distingue

EL 23 de octubre valoramos y reconocemos las acciones de los médicos que cada día salvaguardan la salud.
viernes, 23 de octubre de 2020 · 07:00

Valladolid no solo es considerada la segunda capital del Estado por los servicios con que cuenta; en particular la atención en la salud, sino que también es cuna de grandes médicos que han salvado la vida de un número importante de pacientes que han acudido a ellos, mismos que se distinguen por su entrega, ética y profesionalismo.

Aunque a nivel internacional se celebra el día 3 de diciembre el Día del Médico, en México se conmemora este 23 de octubre, y con la clara intención de reconocer en nombre de algunos de ellos, a cada uno de los que ejercen esta profesión, ahora más que nunca exponiendo su integridad en esta pandemia del COVID-19, se entrevistó a algunos respecto a su trayectoria profesional.

Siempre le gustó la atención materna

Wendy Noemí Aké Pérez, médico en Salud Pública, quien actualmente se encuentra desempeñándose en el programa de salud pública, como representante del componente de salud materna y perinatal, dijo que ella ve y da seguimiento al estado de salud de todas las mujeres embarazadas, así como recién nacidos, mujeres en puerperio y lactancia.

Señaló que prácticamente están a su cargo 82 unidades que pertenecen a la Jurisdicción Sanitaria Número 2.

Con 20 años desde su titulación atendiendo la salud en general y desempeñándose anteriormente como docente en varias instituciones educativas del municipio, su trabajo le ha dejado grandes satisfacciones.

Dijo que desde 1988 que pertenece al sector salud, estando el Hospital General Agustín O’ Horan, luego en el municipio de Temozón, donde recibió muestras de agradecimiento y reconocimiento a su labor.

Comentó que siempre le gustó la atención materna o sea la gineco obstetricia, pero por varias circunstancias no pudo lograr presentar un examen nacional, pero perseveraba llegar a ser responsable de un área materna y perinatal y se dio en su momento y sigue cumpliendo con ese sueño, el cual le apasiona con el trato a ellas y se entristece cuando tiene noticias tristes de algún fallecimiento.

Luego habló de que “llegué en 1984 a esta ciudad con la plaza de sustituto de pasante, haciéndome cargo de la Subdirección del Hospital General de Valladolid en fines de semana”.

De Tabasco a la Sultana de Oriente

Otro de los entrevistados es el médico Gaspar Antonio Barrera Paz, quien tiene la especialidad en medicina Deportiva, dijo que actualmente está en la subjefatura de la Jurisdicción Sanitaria e inició su pasantía en San Felipe en 1991 y posteriormente le propusieron una base a Chan Cenote, donde le agradó la clínica y fue allí donde ocupó la plaza, trasladándose a ese lugar con su esposa y su hija, pero después por cuestiones familiares pidió su traslado a la ciudad de Valladolid en 1994.

Más adelante, en 1998, por su preparación le dieron la oportunidad de estar en la Jurisdicción Sanitaria, en el área de zoonosis y desastres, pero eligió seguirse preparando y especializarse, pue ya había iniciado la rehabilitación o medicina física de manera simplificada, fue que le nació la inquietud por esa área de la salud.

Barrera Paz nació en Frontera Tabasco, su padre es de ese Estado y su madre de Valladolid, y es cuando cursó la preparatoria que volvió a Valladolid en 1982 y luego regresó a la capital de Yucatán a estudiar en la facultad de medicina de la Universidad Autónoma de Yucatán, donde posteriormente trabajó en el Centro Médico de las Américas como médico general.

Su intención es hacer las cosas bien

El médico Orestes Aníbal Somarriba Díaz, actualmente jefe de la Jurisdicción Sanitaria número 2 en Valladolid, agregó que en el Centro Médico de las Américas se le dio la oportunidad de presentar el examen nacional y con la fortuna que los médicos de ese lugar, preocupados por la formación de todos ellos, les prepararon y les dieron clases y abordaron temas para poder presentar el examen nacional y la intención era que crecieran profesionalmente y así emprendió la carrera de ginecología y obstetricia, la cual realizo en el hospital Doctor Juan Grahan Casasús de Villahermosa Tabasco, donde tuvo la oportunidad de escoger sedes de 1995 a 1999 con rotaciones a la Ciudad de México para complementar la experiencia.

Dijo que terminó y regresó a Mérida trabajando ya como especialista y al poco tiempo llegó a Valladolid, instalándose en un consultorio privado y con un contrato en el Sector Salud, donde empezó a cubrir los fines de semana y como fue el último en llegar a esta institución, cubrió vacaciones, turnos de médicos que faltaban, proceso que duró ocho años.

Agregó que renunció en 2007 por motivos personales y se dedicó a la medicina privada, pero recibió la invitación en 2018 del gobernador de Yucatán de estar al frente de la Jurisdicción Sanitaria y desempeñarse al servicio al público y siguiendo con su consultorio privado, trabajando con un equipo de colaboradores.

Mencionó que su meta principal es ser un buen médico, ser ético y empático con la gente y hacer lo mejor en su trabajo, “nadie es perfecto y la perfección no existe en la medicina, y todos están con la mejor intención de hacer la cosas bien, que sus manos y conocimientos puedan servir para cambiar la vida de alguien”, afirmó.

Por Ariel Sánchez y Feliciano Sánchez