Adiós a Germán Pasos Tzec

Germán Pasos Tec falleció este miércoles luego de permanecer convaleciente durante unos días, el hecho consternó a los gremios artístico y periodístico, así como la comunidad LGBTTTIQ+.
jueves, 22 de octubre de 2020 · 08:10

Luego de permanecer convaleciente durante algunos días en la clínica T1 del IMSS, ayer falleció el antropólogo, periodista, escritor y activista, Germán Pasos Tzec.

La noticia dada a conocer por su sobrina, inmediatamente demostró la consternación de los gremios artístico y periodístico, así como de la comunidad LGBTTTIQ+ de la entidad.

Antropólogo con especialidad en Antropología Social, por la Universidad Autónoma de Yucatán, Germán constantemente rompió hitos personales y colectivos. Por tal motivo, llegó a ser reconocido como el Cronista Vitalicio de la comunidad LGBTTTIQ+ por la Red de Personas Afectadas con VIH (REPAVIH) o Miembro Honorario del Consejo Contra la Discriminación de la Diversidad Sexual del Ayuntamiento de Mérida.

Pero para llegar a eso, requirió de una calidad humana y un desinterés para asistir a quienes lo necesitaban; valores que fueron reconocidos a través de mensajes en redes sociales de sus amigos, colegas periodistas y personalidades de la escena local. No importaba si lo conocían poco o mucho, quienes coincidían con él en algún momento se llevaron un grato recuerdo.

En el año de 1992 para concluir con sus estudios universitarios, presentó su trabajo de tesis titulado “Homosexualidad y Cultura: Una visión de la relación homosexual masculina en la ciudad de Mérida”, siendo el primero en abordar desde una visión antropológica este tema que para muchos debía ser silenciado.

Actualmente es parte del catálogo de consulta en la biblioteca de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la UADY, pero para que eso sucediera, tuvo que sortear adversidades. En el artículo “La noche de las mujeres trans en Mérida: 50 años de razzias y empoderamiento”, firmado por Jesús Cámara Ríos y publicado en la revista digital Memorias de Nómada, Pasos Tzec confesó que días previos a presentarla, lo orillaron a arrancar una hoja del encuadernado: “En cada capítulo tenía la mención de un autor. En el capítulo tercero estaba la cita de El Vampiro de la colonia Roma, de Luis Zapata Quiroz. Es una novela de un sexoservidor, pero mencionaba la frase ‘mámame la verga’, entonces el asesor me dijo que era imposible entregarla así”.

Lo hizo, mutiló de esa parte a su tesis, la cual no se vio afectada. Pero sabía que había arriesgado mucho y ganado más, pues, aunque hubo apertura, no lo obligaron a abordar otros tópicos locales, algo que según él era “lo que se espera de un antropólogo”.

Sobre su llegada al periodismo, su amigo y colega Jhonny Oliver Quintal en su portal web relata: “Conocí a Germán cuando éramos jóvenes. Un día, casi pasada la media noche, el fotógrafo Omar López (QEPD) y yo bajamos de los vehículos que transportaba a la prensa a las giras del gobernador interino Víctor Cervera Pacheco. Nos dirigíamos de prisa a la redacción del Diario del Sureste. Nos esperaban con la nota para cerrar edición.

En esa época era común que, a esa hora, jóvenes a los que la sociedad denominaba ‘putos’, ‘maricones’ o ‘mujercitos’, y algunas prostitutas, se sentaran en las bancas de la Plaza Grande. La policía llegaba, cerraba la cuadra y los detenía. Todos corrían hacia diferentes direcciones o se metían al restaurante El Louvre, que estaba en contra esquina del actual Olimpo que, en esa época era un estacionamiento del municipio, con un sitio de taxis. ‘Oiga usted’, me dijo muy propio al alcanzarme. Seguimos caminando. Don Omar me dijo ‘no te detengas’. ‘¿Son ustedes periodistas?’, preguntó. ‘Sí’, contesté. ‘Necesito declarar algo’, respondió. ‘Bueno, te dejo, voy corriendo a revelar’, me dijo el fotógrafo.

Germán quería que publicara que él y un grupo de muchachos gay estaban realizando una campaña de dotación de condones entre los jóvenes que ‘vendían su cuerpo’ en la Plaza Grande, para protegerlos del SIDA/VIH. Después German ingresó al periodismo, era el camino para hacerse más visible. A partir de ahí nació una amistad que perduró hasta el día de hoy”.

Desarrolló su carrera en el extinto Diario del Sureste, en POR ESTO! durante 20 años (en esta sección precisamente), y en entrevistas radiofónicas y medios virtuales, de forma más reciente. Desde esos espacios denunció los abusos y promovió la inclusión. En 2013 recibió la medalla al Periodismo de Espectáculos “Oswaldo Baqueiro López”, conferida por el Ejecutivo Estatal.

Si ya había dejado un documento de valor en los anaqueles de la biblioteca de la UADY, un año después publicó “Mérida Gay. Crónica de los movimientos LGBTTT en la ciudad de Mérida 1960-2014”, seleccionado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Ayuntamiento de Mérida.

Siendo el primero en su tipo en México, documenta sucesos y hechos a través de entrevistas y recopilación periodística con el objetivo de ofrecer, en crónica, las manifestaciones más importantes de colectivos LGBTTT en la capital yucateca.

Sobre Neifa Celiana, a quien ya no volveremos a ver en las Marchas del Orgullo, Germán confesó de nueva cuenta a su amigo Jhonny Oliver Quintal, que a sus 18 años fue cuando se vistió de ella para el concurso “Belleza Travesti”, hecho clandestinamente en Hunucmá en 1977. Siempre contó con el apoyo de su familia.

Retomando la entrevista que concedió a Jesús Cámara Ríos el 15 de julio del 2019, destaca esta frase que resume gran parte de su aportación: “Las personas de orientación no heterosexual estamos viviendo un momento de autoaceptación, de participación y tener un mejor nivel de instrucción para hacer la lucha. Más que las políticas públicas, es la misma comunidad LGBTTTIQ+ la que ha logrado el verdadero cambio”.

Por Gibrán Román Canto