Sor Juana Inés de la Cruz, la musa de "Amor es más laberinto"

Fragmentos de ‘Amor es más laberinto’ se transmitirá los sábados y domingos del 17 hasta el 25 de abril a las 17:00 horas
sábado, 17 de abril de 2021 · 06:00

“Tenemos una deuda con nuestros grandes autores. Los ingleses se saben partes enteras de las obras de Shakespeare. Nosotros conocemos poco a Sor Juana”, expresa a POR ESTO!, la directora artística del Teatro de la Rendija. Raquel Araujo, con relación a Laberíntica.

Fragmentos de ‘Amor es más laberinto’, producción que la agrupación de artistas relanza en formato virtual para conmemorar el aniversario luctuoso número 326 de la filósofa, poeta, ensayista y científica mexicana Sor Juana Inés de la Cruz. 

Las piezas audiovisuales que conforman el homenaje han sido descritas por el grupo como “paisajes corporales, duplicaciones de personajes, laberintos de sonidos, flores y bestias en collage”. Podrán visualizarse los sábados y domingos del 17 hasta el 25 de abril a las 17:00 horas (tiempo del centro de México), a través de Facebook Live (@TeatrodelaRendija) y también en el canal de YouTube (La Rendija Sede Virtual).

El homenaje, así, promete librarse desde la imaginación, a la vez que cada participante tendrá “una mirada crítica sobre sus personajes y de otros dentro de la obra. Así, crearemos una especie de laberinto visual con las diferentes propuestas que harán los actores”. 

“Por ejemplo”, detalla Araujo, “mi visión crítica es sobre el personaje de Teseo”, quien, en la mitología, vence al minotauro en su laberinto. “Entonces haré un audiovisual en locaciones al aire libre o preparando un set en mi casa para hacer mi versión de ese personaje en Amor es más laberinto”. 

El texto de Sor Juana, estrenado el 11 de enero de 1689,  es en sí mismo un acto de “enorme valor, pues habla de frente al virrey, Gaspar de Silva, durante la celebración de su cumpleaños, recién llegado a la Nueva España”. La autora del siglo XVII menciona “que es mucho más importante ser Teseo por sus hazañas que por su sangre real. La autora, desde la voz de Teseo, Príncipe de Atenas, menciona cosas tremendas y defiende el ser criolla”, explica Araujo. 

Apunta además: “este héroe, a la luz del siglo XXI, puede verse de distintas maneras. Con el grupo de actores, desde que empezamos a planear esta obra, siempre hemos relativizado el personaje de Teseo. Si bien fue un héroe, también fue alguien que raptó y violó mujeres. La mirada crítica de Aída Segura sobre este personaje aporta así una visión de género.

Eso permite replantear el personaje por medio de un trabajo de performatividad desde la perspectiva de algunas mujeres”.
En El divino Narciso, también de  Sor Juana e interpretada anteriormente por el elenco de La Rendija, “todos los personajes fueron realizados por mujeres, incluso el de Narciso. Eso es muy interesante para el espectador, porque aun cuando entramos en la convención y aceptamos que una mujer está representando a un hombre, siempre hay un sesgo que nos hace regresar y repensar ese cuerpo y esa palabra”. 

Itzel Riqué, actriz que ha interpretado a Licas, el embajador que llega a traer prisionero a Teseo frente a Minos, “decidió trabajar en esta ocasión a este último, el Rey de Creta, gran tirano que ordena sacrificar a los jóvenes atenienses en el laberinto con el minotauro. Comienza su monólogo de una manera tremenda: ha muerto su hijo.

Esta dimensión de aquel hombre terrible que está cobrando venganza lo vemos ahora desde el dolor de su pérdida. Itzel prepara así un trabajo funerario, que, además, con el duelo a nivel mundial con la pandemia, es algo que nos toca mucho”, comparte la directora. 

“Cada actor irá desgranando y atravesando el texto de Sor Juana, y esto lo vemos como una deriva, cruces visuales sobre a dónde nos conduce a nosotros la interpretación del texto que es conocido por el grupo de actores”, añade la fundadora del Teatro la Rendija.

“Lo hacemos con una libertad creativa y lúdica para proponer posibilidades escénicas para la pantalla con el verso. Sobre todo, lo que más nos interesa es que, a través de lo visual, el espectador se acerque al texto de Sor Juana, a escucharlo. Creemos que, si el cansancio de las pantallas no nos permitiría disfrutar de una presentación teatral de dos horas, se puede tener pequeñas cápsulas escénicas donde nos acercan un pedacito del texto de Sor Juana”. 

GCS