Kulubá, el 'agua del perro salvaje kulú' en Tizimín

Pese a ser un sitio arqueológico poco conocido, guarda un gran valor histórico y cultural
jueves, 8 de abril de 2021 · 15:50

Si eres de las personas que les encanta conocer siempre lugares nuevos, Kulubá es perfecto para ti.

Ubicada al nororiente de Yucatán, más específicamente a 37 kilómetros de Tizimín, se encuentra la zona arqueológica de Kulubá, pasando el poblado de San Pedro y unos kilómetros más adelante se observará el desvío a las maravillosas ruinas arqueológicas.

Kulubá es un destino poco conocido, pero que tiene un gran valor histórico y cultural, ya que se trata de una zona arqueológica que ha pasado por varios proyectos de restauración, los cuales no se han concretado por diversos factores. Sin embargo, continúa recibiendo algunas visitas de viajeros.

Zona arqueológica

La palabra Kulubá significa “agua del perro salvaje kulú”, como tal es un complejo arquitectónico maya considerado como uno de los más importantes del estado, que abarca alrededor de 9 kilómetros y su construcción data del año 300 a. C al 1000 d. C. Además, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en un boletín, señaló que Kulubá fue influenciado por la región Puc y la de Chichén Itzá.

Este lugar abrió por primera vez sus puertas al público en el año 2018, dejando así ver una vez más la riqueza de la cultura maya.

La zona arqueológica se encuentra en medio de algunos de los ranchos ganaderos de Tizimín, los cuales son también parte de la cultura y economía del municipio. Estarás rodeado de mucha vegetación, y caminarás largos trayectos bajo el abrazador sol de la península, pero sin duda alguna valdrá la pena cuando observes la magnífica arquitectura de los antiguos mayas.

Estructuras

Kulubá cuenta con tres principales estructuras las cuales reflejan que fueron esculpidas para los grandes jerarcas mayas de la época, el Templo de los Mascarones es la principal vista del sitio, donde podrás observar su hermoso techo alto en forma de arco y admirar el resto de edificaciones que se encuentran entre la maleza y la selva, dándonos así una sensación de exploradores.

A la par de ello podrás encontrar un pequeño museo donde guardan partes únicas que han sido encontradas en el trascurso de los descubrimientos realizados por el INAH.

Con información de México Desconocido e INAH

SY