San Juan del Monte, leyenda en selvas quintanarroenses

Conocido mayormente como Juan del Monte, su labor consiste en cuidar a plantas y animales, otorgarles alimento y protegerlos
viernes, 5 de febrero de 2021 · 19:29

La leyenda de San Juan del Monte tiene su origen en la época prehispánica, con Quintana Roo como protagonista. Las creencias en esa época, decían que la madre naturaleza concibió una pequeña criatura en forma de ánima, que se encargaría de proteger toda su creación y legado.

Su nombre era San Juan del Monte  (o Juan del Monte) y su labor consistía en brindar cuidado a plantas y animales, otorgarles alimento y protegerlos.

En otras versiones, se dice que era un guardián que no disfrutaba en absoluto, que las personas entraran a su territorio protegido.

Hoy en día, quienes conocen esta leyenda, recomienda que si algún aventurero se atreve a entrar a las selvas de Quintana Roo, primero debe pedir permiso a San Juanito bendito, para no perderse en el monte ni tener eventos desafortunados con animales, pues cuentan que, de no pedir permiso, es posible toparse con gran cantidad de animales venenosos y peligrosos.

Incluso, la mayoría de las versiones aseguran que es un espíritu maligno y que, si se tiene la mala suerte de encontrarlo malhumorado, el pedir permiso no garantiza nada y de cualquier forma perseguirá al intruso.

La historias contadas, con relación al personaje, se centran en cazadores furtivos y campesinos que no piden el debido permiso y se adentran sin ninguna consideración, sin embargo, algunos casos mencionan que el ánima, primero avisa al comenzar a silbar incesantemente para ahuyentar.

La historia de Pancho.

Relacionado a esta leyenda, la historia de Pancho es la más famosa.

Pancho era un niño de 7 años que fue enviado por su madre a llevar comida a su papá, quien se encontraba trabajando en los potreros.

Para poder llegar, era necesario internarse en el monte y al emprender su camino, comenzó a escuchar una voz idéntica a la de su padre que le decía “estoy aquí, ven conmigo”, sin embargo este no era el padre de Pancho, era Juan del Monte.

Ya que el pequeño, jamás había escuchado la historia, se dejó engañar por las tácticas malignas de Juan del Monte, adentrándose en la selva y perdiéndose en él.

Afortunadamente, su familia se dio cuenta de inmediato que no estaba, por lo que salieron a buscarlo y su padre lo halló en un lugar bastante alejado, fue así como se pudo conocer esta mítica historia.

Con información de Leyendas de México

MA