Conoce la herencia turística que un pirata le dejó a Isla Mujeres

La historia de este pirata sorprende a quien la conoce; Isla Mujeres guarda su herencia y con ello, la historia detrás de ella.
miércoles, 23 de diciembre de 2020 · 13:31

Algunas personas no creerían que cerca de Quintana Roo pasaron llegar piratas, pero fue una ruta muy transitada por ellos.

Hay uno en particular, que fue traficante de esclavos en el siglo XIX  trayéndolos desde África y en su paso, por aquel entonces, del territorio de la Nueva España, se enamoró de Isla Mujeres, aunque la leyenda que ronda en la Isla, indica que fue el amor lo que hizo que se estableciera en la ínsula y la usase como refugio.

El amor es un sentimiento bastante fuerte, y en esta historia es lo que más drama trae, y cuyo final dejó a la isla una herencia que hasta la fecha es uno de sus puntos imperdibles cada vez que la visites.

Nos referimos a la Hacienda Mundaca, localizada al interior del territorio insular de Isla Mujeres es un punto turístico importante que sin duda, no se debe omitir en el recorrido que se da en ella.

La historia de la hacienda se remonta que Fermín Mundaca, cuando llegó a la Isla, quedó de inmediato flechado de una muchacha indígena oriunda de la isla, y como parte de sus cortejos amorosos, ordenó levantar una propiedad que se extendía en parte del centro del territorio, y que usó también como guarida.

Esta fue nombrada "Vista Alegre" y se inspiró en la mujer, conocida como "La Trigueña" para su construcción; desafortunadamente la mujer rechazó tajantemente su amor y cercanía, y en consecuencia, el pirata Mundaca decidió vivir sólo, manteniendo el contacto únicamente con sus sirvientes y proveedores.

Pero, aunque existe una tumba en el cementerio de Isla Mujeres que estaba destinada para él a su muerte, el Pirata Mundaca falleció en Mérida luego de una larga enfermedad y el cuerpo nunca regresó a la isla. 

En la hacienda aún se leen inscripciones que él mismo dejó, una de ella es cuando se llamaba "Náutico y Piloto"; también se observa un reloj solar diseñado por Mundaca.

El visitante puede pasear por los senderos entre la selva, la laguna cercana a la propiedad y disfrutar de manera directa de todas las creaciones que heredó Fermín Antonio Mundaca y Marecheaga a Isla Mujeres, y a Quintana Roo.

Con Información de Caribe Mexicano

CG