Síguenos

Volver

ÚLTIMA HORA

Elecciones 2024

Claudia Sheinbaum visitó el sur de Mérida

Volver

SIGUIENTE NOTICIA

Campeche

Calle de Ciudad del Carmen, entre charcos y basura por más de 20 años.Vecinos de la zona señalaron que las autoridades ignoran sus peticiones para resolver esta problemática

México

En momentos de gran peligro, los mexicanos están respaldados por miembros altamente capacitados del Cuerpo de Fuerzas Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional

Los Buzos de Combate son personas cuya labor abarca arduas tareas, están capacitados para enfrentar situaciones terrestres y bajo agua derivadas del crimen organizado, narcotráfico y desastres naturales.

Forman parte del “Cuerpo de Fuerzas Especiales” de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), donde reciben un entrenamiento que es de los más difíciles que existen en nuestro país.

La búsqueda, rescate y salvamento de personas, así como labores submarinas para enfrentar el crimen organizado y la desactivación de explosivos son parte de sus especializaciones.

La primera parte de su formación dura en promedio cuatro semanas en las que pasan más tiempo bajo el agua que en tierra firme; inician su entrenamiento en una alberca olímpica y posteriormente en una fosa de clavados.

El Centro de Capacitación se encuentra en el Campo Militar 37-B de Temamatla, Estado de México, donde se les entrena para poder cargar más de quince kilos a cuestas entre su equipo especial y armas.

La primera etapa de su entrenamiento es una especie de filtro de selección, los más aptos pueden pasar a la fase final de la capacitación, al finalizar, los participantes de mejor rendimiento son colocados dentro de los batallones de Fuerzas Especiales de la Sedena.

De los 35 elementos con los que comienza la primera fase del entrenamiento, sólo de 10 a 12 buzos logran concretarlo, pasando a formar parte de un reducido grupo de elite dentro de las fuerzas especiales de la Sedena.

Al pasar a la segunda etapa, suelen practicar tareas de alta dificultad como el ingreso al mar en caída libre desde trampolines.

Entre las características que necesitan cubrir, los prospectos a buzos deben poder correr una distancia de cinco kilómetros y tener gran fuerza en brazos y abdomen, además de cumplir con los parámetros de inserción, inmersión y desplazamientos marítimos.

Además, reciben especial instrucción para enfrentar problemas en ambientes hostiles, así como métodos se supervivencia en mar abierto. De igual forma reciben entrenamiento en la extracción de rehenes y el patrullaje, navegación y toma de playas en terreno hostil.

Los buzos que logran formar parte del Grupo de Elite de las Fuerzas Especiales de la Sedena, son capacitados en el Subcentro de Adiestramiento de Buceo de Cozumel, Quintana Roo, único centro especializado en buceo del país. Dicho entrenamiento en aguas abiertas dura aproximadamente doce semanas.

Por Redacción Digital Por Esto! Con información de Milenio MF