¿Qué es la Partida Secreta?

miércoles, 1 de mayo de 2019 · 04:20
Por considerar que se trata de una rémora del viejo régimen, se propuso reformar el Artículo 74 de la Constitución Política para prohibir las partidas secretas en el Presupuesto de Egresos de la Federación La partida secreta se trata de una bolsa extra, financiada con recursos del Presupuesto de Egresos, que fue creada en 1917. De acuerdo con lo que establece el Artículo Constitucional 74 le es otorgada al Presidente quien puede hacer de su uso sin que haya algún control, ya sea para incrementar gasto o en situaciones no previstas. Además de la Presidencia también podía ser usada por las dependencias federales “No eran las secretarías, era la centralización presidencial que controlaba la partida secreta y repartía el dinero como quería y no había absolutamente ninguna limitación para esos gastos” En la iniciativa se expuso que el 14 de enero de 1917, el Congreso Constituyente aprobó, sin discusión y por unanimidad de 150 diputados, el segundo párrafo de la fracción I del artículo 65, introduciendo la partida secreta en la Constitución La partida secreta dejó de aparecer en el Presupuesto de 1922 pero se encontraban autorizados gastos “extraordinarios e imprevistos” que realizaban una función semejante mediante las llamadas “partidas globales” de ejercicio discrecional En 1927 las partidas secretas volvieron al presupuesto con el nombre de “gastos eventuales y extraordinarios”, pero a partir del año siguiente, ya no se les dio la denominación “secreta”, probablemente porque no era necesario, pues el presupuesto dejó de discutirse en la Cámara y empezó a aprobarse mediante votación unánime Bajo gobiernos presididos por civiles, a partir del sexenio de Miguel Alemán, existió todo un ramo de “erogaciones adicionales”, el cual alcanzó hacia 1952 el 6.5 por ciento del gasto total; en 1958, con Adolfo Ruiz Cortines ese porcentaje se ubicó en el 12.5; y con Luis Echeverría subió hasta el 24.36 por ciento del total del gasto Con José López Portillo en 1982, en plena crisis, dentro de las “erogaciones extraordinarias”, los “gastos contingentes” eran ejercidos directamente por el Presidente de la República. La partida secreta llegó ese año a 56 millones de dólares. En los años 1995 y 1996 la partida secreta fue autorizada en el mismo nivel que en 1994 (650 millones de pesos) En el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari la partida secreta creció hasta 190 millones de dólares