Ganaderos en Bacalar se preparan para la temporada seca con jagüeyes y sorgo

Debido a la sequía registrada en 2023, los ganaderos en Bacalar ya se están preparando para la temporada seca, utilizando jagüeyes y sorgo
martes, 20 de febrero de 2024 · 10:42

Después del impacto negativo de la sequía registrada durante el 2023, que requirió la implementación de medidas emergentes para evitar repercusiones negativas en el sector ganadero antes de la llegada de la ola de calor, se dio inicio este lunes a la construcción de 11 jagüeyes en la zona poniente de Bacalar, donde se concentra la mayor cantidad de ganado del Sur de la Entidad. El propósito es recolectar agua de lluvia en las próximas semanas para mantener reservas.

Además de la construcción de estos 11 jagüeyes, las autoridades municipales están preparando y cultivando 40 hectáreas de sorgo con el fin de mitigar la sequía prevista para mediados del mes de marzo, coincidiendo con la primavera. Durante el 2023, la falta de previsiones, tanto de las autoridades como del sector ganadero, llevó a la adopción de una serie de medidas.

La construcción de los depósitos de agua representa una inversión de medio millón de pesos por parte del Ayuntamiento de Bacalar en la zona Poniente del municipio para paliar el estiaje que afecta la actividad ganadera cada temporada seca.

Durante una asamblea informativa celebrada en el poblado de Miguel Alemán, que reunió a los miembros de la Asociación Ganadera Local, se presentaron los lugares donde se llevará a cabo la construcción de los jagüeyes, los cuales podrán ser utilizados por los ganaderos de la zona.

Dada la elevación de muchas de las comunidades ganaderas del Poniente de Bacalar, la perforación de pozos no es una opción viable. Por lo tanto, una de las formas más antiguas, pero también más eficaces de obtener agua es la construcción de depósitos de agua, que permitirán la captación de agua de lluvia para el ganado.

En el municipio de Bacalar hay 400 ganaderos con más de 40 mil cabezas de ganado en total. Durante los meses de marzo y abril del 2023, estuvieron en riesgo debido a la intensa sequía, lo que llevó a la activación de medidas emergentes. Al final, sólo se perdieron entre 5 y 10 cabezas en las zonas más críticas, donde no llegaron los apoyos gubernamentales.

Ante el panorama descrito y la posibilidad de que la sequía sea más intensa este año, los ganaderos prefieren prepararse para enfrentarla sin que el hato ganadero del municipio sufra pérdidas significativas.

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AT