Pasa desapersivido el polvo del Sahara en Quintana Roo

Casi imperceptible fue el polvo de arena proveniente del Sahara que cayó durante el pasado fin de semana en algunas partes de Quintana Roo, del cual tanto el sector Salud, como Protección Civil resaltaron que dicho fenómeno no es peligroso, pero si hay que tomar algunas previsiones, sobre todo con aquellas personas que sufran de algún padecimiento respiratorio.

Por este motivo y para evitar los rumores que podrían generar, la Coordinación de Protección Civil del Estado apuntó que estos vientos suelen llegar al territorio quintanarroense entre los meses de abril y mayo, y aunque recalcaron que no son dañinos, llamaron a tomar varias medidas, sobre todo para las personas con otras comorbilidades.

Hay que recordar que es durante el verano de los países africanos cuando se genera esta masa de aire que se mueve hacia el océano Atlántico, hasta llegar al territorio de América y entre las características de la llegada de este polvo africano está que el día se hace grisáceo y los atardeceres rojizos.

La coordinación estatal de Protección Civil de Quintana Roo explicó que las tormentas de arena son fenómenos meteorológicos comunes en las regiones áridas y semiáridas. El polvo se origina por minerales en las zonas de África Septentrional, la península arábiga, Asia Central y China.

Aunque no representa un riesgo para la población, Protección Civil dio a conocer recomendaciones como la de no exponerse a las concentraciones de la nube de polvo, utilizar lentes y cubrebocas o pañuelo, sobre todo en caso de padecer enfermedades respiratorias.

La dependencia quintanarroense también hizo un llamado a la población para no hacer caso de rumores y permanecer atento a la información difundida a través de sus redes sociales.

Hay que recordar que cuando ocurre, suele ser de corta duración, ya que no dura más de una semana, pero la presencia de vientos alisios en ciertas épocas del año la hace más propensa a que pueda cruzar el Atlántico y recorrer más de 10.000 kilómetros.

Pero este fenómeno no es malo del todo, ya que en el mar puede actuar un doble beneficio, debido a que “absorbe el dióxido de carbono y da mucho alimento a los peces”, esto último debido a que los componentes que contiene el polvo sahariano son fertilizantes del fitoplacton.

Cabe mencionar que la cantidad de polvo del Sahara que llega a Quintana Roo y al resto de la zona del Golfo de México depende de la intensidad del viento y la concentración del mismo en el continente africano.

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NR