Investigadora acusa a 'pseudoecologistas' de intentar lucrar con la Laguna de Bacalar

La investigadora María Luisa Villarreal relató que los 'pseudoecologistas' obtendrían recursos del Gobierno y de asociaciones, lo que convierte en un negocio el ambientalismo por la Laguna de Bacalar
lunes, 27 de noviembre de 2023 · 10:31

Existe una nueva “intentona” de pseudoambientalistas que buscan un beneficio económico para declarar Hábitat Crítico a la laguna de Bacalar, pues de lograr que este destino alcance esa calificación, obtendrían recursos económicos de diferentes fondos del Gobierno y de asociaciones internacionales, lo cual convierte en un negocio para unos cuantos el “ambientalismo”, advirtió la investigadora de Ecología Política del Nivel de la Cuenca de la laguna de Bacalar y el Sur de la Península de Yucatán, María Luisa Villarreal Sonora.

Explicó que de obtener la declaratoria de Hábitat Crítico, podría acabar con la actividad turística de los municipios de Bacalar y Othón P. Blanco, que están unidos por el mismo cuerpo lagunar, ya que en ella se establecerían medidas restrictivas para el uso y goce de las áreas a declarar, además que se activarían medidas legales que permitirían expropiar diferentes zonas y balnearios, que ya son considerados sitios turísticos.

Villarreal Sonora explicó que el concepto de Hábitat Crítico está bien definido en la Ley de Vida Silvestre, pero lo que los “pseudoambientalistas” pretenden proteger como la laguna, estromatolitos y los caracoles, chivitas, no son silvestres, además que este tipo de reserva fue creada desde el año 2000, pero por su inviabilidad, debido a que es altamente restrictiva, apenas el año pasado, 22 años después, se hizo la primera declaratoria de este tipo en Chiapas.

Destacó la investigadora que los Hábitats Críticos son violatorios a los derechos de los pueblos indígenas, ya que son impositivos. No es necesaria una consulta pública, ni de los dueños que queden inmersos dentro del polígono, e inclusive, establece que el Gobierno puede quitarte el derecho de dominio, te puede quitar tu terreno; lo peor, que es retroactivo, es decir, si tienes un proyecto que los académicos de las ONG, (que siempre serán asesores de un Hábitat Crítico), consideran que tiene que declararse una zona de no tocar, te lo pueden expropiar. Si dicen que los manantiales, un balneario o alguna otra zona son claves para esta conservación, te los expropian sin consideración.

Explicó que por ello, el medio ambiente es buen negocio para un grupo de personas, por eso la insistencia con la laguna, pues para establecer una medida de este tipo, se requieren muchos fondos para proyectos, para enseñar a la población cómo cuidar y proteger su entorno natural, recursos internacionales que provienen del Fondo de Áreas Naturales Protegidas que maneja una ONG (Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza), el cual maneja un fondo mundial que anualmente paga todos estos manejos de las reservas, y mientras más hectáreas tengan esos grupos, más dinero reciben.

El origen internacional del concepto de Hábitat Crítico viene del Acta de Especies en Peligro de Estados Unidos de 1973, una importación norteamericana que al tercer año de aplicarlo en ese país, se tuvo que cambiar porque es violatorio a los acuerdos internacionales para la biodiversidad y viola todo tipo de derechos de la población con base en una especie, cuando hay todo un ecosistema que lo conforma.

Actualmente, pobladores, ejidatarios, empresarios y prestadores de servicios turísticos de Bacalar temen que les den “madruguete” con una declaratoria de Hábitat Crítico para la laguna que restringiría su actividad, que se ha convertido en la principal generadora de empleos, en el Sur del Estado, es por ello que trabajan en conjunto para evitar que se afecte el desarrollo del Sur del Estado.

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GC