En Quintana Roo, desfile revolucionario termina en descontento y caos vial

Los desfiles para celebrar la Revolución Mexicana en Quintana Roo tuvieron de todo, ya que los participantes se quejaron por cambios de ruta y muchos inconvenientes
martes, 21 de noviembre de 2023 · 12:28

Un extenso desfile cívico-militar en conmemoración del 113 Aniversario del inicio de la Revolución Mexicana concentró a unos 25 mil participantes, en 13 contingentes, lo que generó aglomeraciones viales, basura y personas deshidratadas.

El desfile inició a las ocho de la mañana y fue encabezado por elementos de la Dirección de Tránsito y el 64 Batallón de Infantería y autoridades municipales.

Deportistas infantiles, juveniles, clubes de charros, “Adelitas”, coreografías, cuerpos de seguridad, fuerzas militares y funcionarios del Ayuntamiento de Benito Juárez formaron parte de los contingentes.

Afectaron la circulación

Desde las siete de la mañana, decenas de agrupaciones se dieron cita en el cruce de las avenidas José López Portillo y Kabah, para iniciar el desfile conmemorativo a la Revolución Mexicana de 1910, evento que el año pasado fue reanudado en la ciudad después que se suspendiera desde el año 2015.

Para este evento, la Dirección de Tránsito Municipal procedió con el cierre parcial de las avenidas aledañas al Palacio Municipal, así como parte de la avenida José López Portillo, Uxmal y Kabah, a la altura de la glorieta “El Albañil”, lo que originó que la circulación se ralentizara en esas zonas generando el malestar de algunos automovilistas.

En tanto, que trabajadores que diariamente se trasladan hacia la Zona Hotelera tuvieron que armarse de paciencia en sus trayectos, con los consiguientes atrasos en sus horarios de entrada.

Los participantes en el desfile se quejaron que fueron muchas horas y en esta ocasión, a diferencia de otras veces, no les dieron agua para hidratarse, pese a lo largo que fue el recorrido y todas las horas que duró.

De acuerdo con fuentes del Ayuntamiento de Benito Juárez, este desfile contó con la participación de poco más de 25 mil personas, entre civiles y miembros de las instituciones de seguridad que conformaron 13 bloques de contingentes.

Fueron aproximadamente 9 mil 500 estudiantes, 6 mil 900 espectadores, y el resto, deportistas y miembros de diversas instituciones municipales, como Fuerzas Armadas, Dirección de Tránsito, Protección Civil e Instituto Municipal del Deporte, entre otras.

Molestó a chetumaleños  la falta de información

En la capital del Estado, el desfile cívico-militar y deportivo generó quejas entre los asistentes, quienes coincidieron en señalar que acudieron a presenciar la marcha por la avenida Héroes, pero se llevaron una desagradable sorpresa al ver que el derrotero no pasaría por esa vialidad, sino que la ruta fue trasladada a la avenida Álvaro Obregón para finalmente culminar en el Boulevard Bahía.

Desde muy temprano las familias chetumaleñas acudieron a la avenida de los Héroes para disfrutar el desfile; sin embargo, la confusión se hizo presente al no ver los contingentes o a los participantes en los lugares donde siempre se había reunido, ya que se desconoce a quién se le ocurrió la idea de cambiar la ruta del desfile como se había hecho durante casi toda la vida en la capital del Estado, lo cual no fue del agrado de la gente oriunda de esta ciudad.

Por ello, algunas personas dieron su opinión referente a la decisión del cambio de dirección del tradicional desfile en la ciudad de Chetumal.

Genny Leal dijo que a ella desde muy niña sus padres la llevaban a ver el desfile, que iniciaba en los alrededores del Museo de la Cultura Maya, bajando por la avenida Héroes y terminando en los bajos de Palacio Municipal, donde el Gobernador en turno saludaba desde el balcón principal a los participantes a diferencia de lo que se vivió ayer con el cambio que nadie supo hasta el mismo día del desfile.

Por su parte la señora Delia Gómez, dijo que se sintió molesta porque no les dejaron espacio para ver nada, además dijo que le da coraje ver como tiran el dinero en la renta de las carpas para que las autoridades tengan sombra, mientras los ciudadanos tienen que estar bajo los rayos del sol, peor aun cuando presumen de austeridad y honestidad, concluyó.

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AT