Arreglan fuga de agua en el Hospital General de Chetumal con un envase de suero

Con un envase de suero y un equipo intravenoso, personal del Hospital General de Chetumal reparó una fuga de agua en una tubería, pues la falta de inversión provocó que la estructura se debilitara, evidenciando graves problemas y la necesidad de realizar reparaciones urgentes.

Trabajadores del Sector Salud de Quintana Roo que laboran en las instalaciones de la citada clínica dependiente de la SESA difundieron la imagen, en la que se aprecia una fuga en la tubería de PVC, por lo que tuvieron que improvisar con material médico para canalizar el agua hacia una coladera a fin de evitar un encharcamiento.

Aunque el remedio fue creativo por parte del personal del citado nosocomio y tras ser difundida la imagen en diferentes plataformas y grupos de Facebook de la capital del Estado, los habitantes consideraron que se trata de un hecho lamentable, debido a que el presupuesto gubernamental no se ha aplicado en estas urgencias.

Aunque la fotografía rápidamente se volvió viral entre los chetumaleños, ninguna autoridad de la Secretaría de Salud de Quintana Roo ha dado ninguna explicación o informado si ya se realizó la reparación de esta fuga y el motivo por el cual no había sido atendida.

Es de señalar que esta no es la primera ocasión en la que se denuncian carencias médicas y desperfectos en el inmueble, pues durante el inicio de la pandemia del coronavirus, enfermeros y personal médico denunció que sólo les estaban entregando un cubrebocas no quirúrgico, para hacerle frente a la enfermedad.

Posteriormente y en el periodo más álgido de la pandemia, cuando Chetumal se convirtió en el epicentro de la misma, se volvieron a realizar manifestaciones, pues el personal médico señalaba que no les dotaban de suficiente material y medicamentos para atender a los pacientes que llegaban.

Otra de las quejas más recientes ocurrió hace dos años, cuando el paso de la Tormenta Tropical Cristóbal por el Sur, ocasionó lluvias intensas sobre la capital del Estado, mismas que provocaron filtraciones hacia el interior del hospital, dañando con esto el falso techo de plafón.

Aunque el edificio ha tenido varias remodelaciones desde su construcción, la infraestructura hidráulica tiene más de 30 años, cuando fue puesta en operación por autoridades federales.

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CG