Jornada violenta en Bonfil, Cancún: Se registraron dos muertos y una emboscada a policías

La delegación Alfredo V. Bonfil en Cancún fue el escenario de diversos ataques armados, además de que, durante investigaciones policiacas, sicarios buscaron sacarlos de la zona
viernes, 8 de abril de 2022 · 08:01

En medio de balaceras protagonizadas por presuntos integrantes de un grupo delictivo, vivieron los habitantes de la delegación Alfredo V. Bonfil de Cancún, desde la noche del pasado miércoles, cuando dos hombres fueron ejecutados. Uno de ellos quedó tendido entre las mesas de una taquería.

El segundo, horas después, fue descubierto a unas calles. Nadie quería señalar a las autoridades dónde se encontraba la segunda víctima, fue a través de llamadas anónimas que dieron la ubicación; los elementos habían culminado las diligencias en torno al doble homicidio, cuando uno de los autos utilizado en este hecho fue localizado con indicios en su interior.

Más tarde, agentes de investigación terminaban con las primeras diligencias y regresaban a la Fiscalía General del Estado (FGE Quintana Roo), cuando fueron emboscados cerca de las avenidas de Los Colegios y Huayacán, uno de ellos, herido y otro con crisis nerviosa, fueron trasladados a una clínica privada, donde su estado de salud es reportado como estable. Tiempo después, las autoridades fueron amenazadas sobre un nuevo ataque, por lo cual la vigilancia fue reforzada. Hasta el momento, no hay detenidos.

Un posible choque entre grupos antagónicos que opera principalmente en el ejido Alfredo V. Bonfil fue lo que desató una balacera sobre la avenida Plutarco Elías Calles, la noche del pasado miércoles, donde quedó el cuerpo de un hombre tendido sobre un charco de sangre al interior de un establecimiento, mismo que continúa en calidad de desconocido.

Esa noche, los habitantes, que de lejos observaban a las autoridades realizar su trabajo, mencionaban que había otro occiso, el cual había corrido tras repeler la agresión, pero finalmente había sido abatido. Los ministeriales los cuestionaron sobre esta versión, pero los testigos guardaron silencio, incluso dieron características erróneas sobre el auto utilizado por los delincuentes, quienes fueron buscados sin ser localizados.

Entrada ya la madrugada, de manera anónima dieron la dirección donde había quedado el otro cuerpo, el cual fue identificado como Manuel Hilario M. R., de 19 años de edad, originario de Durango, quien se desempeñaba como mecánico de motos en Cancún. Ahí se logró saber que los atacantes llegaron a bordo de una camioneta de color gris y un auto negro. Entre los indicios asegurados localizaron 80 casquillos percutidos, en su mayoría de armas largas y tres autos más, los cuales presentaban daños.

Localizan uno de los autos que utilizaron los sicarios

Por la mañana del mismo miércoles, a través del número de emergencias 911, elementos municipales y ministeriales acudieron a un reporte en el cual se mencionaba que había un auto abandonado y presentaba impactos de arma de fuego.

A su llegada a la calle Margarita Maza de Juárez, a cuatro calles de la taquería donde ocurrió el ataque, en una brecha, los uniformados localizaron el vehículo y encontraron varios casquillos percutidos que coincidían con los calibres utilizados la noche anterior. La unidad fue asegurada como indicio.

Emboscada

Más tarde, tres elementos ministeriales, quienes viajaban a bordo de un auto Nissan March, de color gris, realizaban trabajos de campo y buscaban viviendas y comercios con cámaras de vigilancia en la delegación Alfredo V. Bonfil de Cancún para obtener imágenes que pudieran servir para la localización de los responsables del doble homicidio.

Los uniformados transitaban sobre la calle Venustiano Carranza, para salir hacia la avenida Huayacán, por la parte trasera del ejido, sin percatarse de que, a bordo de dos camionetas y un auto, un grupo de sicarios los estaban siguiendo y finalmente fueron emboscados.

El ataque ocurrió cerca de una escuela primaria, en los alrededores había mujeres con los niños que iban saliendo del plantel escolar, además de personas que se encontraban en comercios aledaños, quienes lograron ver cómo el comando armado rodeó la pequeña unidad policial cuyo conductor trató de echarse de reversa para evadir la agresión y posteriormente, alrededor de seis hombres con armas largas comenzaron a disparar.

Pánico y caos

Los tres elementos de la Policía de Investigación (PDI) que viajaban en el auto compacto, una vez que su unidad ya no pudo continuar su marcha, la cual quedó sobre la banqueta entre la fachada de una vivienda y un poste, trataron de protegerse entre ellos mismos.

Uno se tiró entre los asientos traseros, los dos que iban al frente se agacharon al mismo tiempo en que pidieron apoyo. Otros uniformados, quienes se dirigían a la zona para ayudar con las diligencias, rápidamente se aproximaron, seguidos por elementos de la Policía Quintana Roo, La Secretaría de Marina (Semar), el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN), luego de que se activara el llamado Código Rojo.

En la calle, las personas corrían en diferentes direcciones, algunos protegían a los niños, otros se escondieron al interior de los comercios y se tiraron al suelo. Por fortuna, no hubo víctimas colaterales y luego de unos minutos, los sicarios se retiraron abandonando una de las camionetas en el Boulevard Luis Donaldo Colosio de Cancún, así como en la avenida Huayacán, donde se encuentran los accesos al ejido.

En cuestión de minutos la zona se vio llena de unidades de los tres órdenes de Gobierno, quienes cerraron los accesos. Autos particulares, de alquiler, motocicletas y todo aquel que intentara pasar fue minuciosamente inspeccionado, ya que sabían que los delincuentes no lograron salir, sin embargo, no fueron localizados.

Unidades médicas particulares también fueron activadas, luego de que se confirmara que había ministeriales heridos al interior del auto, el cual presentaba alrededor de 20 impactos, uno de ellos hizo blanco en la pierna de uno de los uniformados, el cual tuvo desprendimiento de piel al ser impactado por un proyectil de grueso calibre, el otro debido a una crisis nerviosa, también tuvo que ser hospitalizado.

Cateos

La presencia de las autoridades en el lugar duró un par de horas. Luego de la agresión en contra de los ministeriales, cuatro viviendas identificadas como puntos de venta de drogas fueron cateadas, sin que se detuviera a ninguna persona. Las autoridades no mencionaron si decomisaron drogas o armas de fuego.

A través de las redes sociales, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo, informó que se había iniciado la investigación correspondiente tras la agresión y que ambos uniformados se encontraban estables, por la tarde en una llamada anónima al número de emergencias 911, realizaron amenazas en contra de los cuerpos policíacos.

Síguenos en Google News y recibe la mejor información.

CG