Monja abandona México desde el aeropuerto de Cancún para ayudar a beliceños

Una joven monja que decidió dejar atrás el patriotismo y orgullo de ser mexicana para así arribar a otro territorio para brindar sus servicios caritativos
sábado, 11 de septiembre de 2021 · 19:39

Una joven madrecita que deambulaba buscando su vuelo por el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), confesó su desinterés de festejar las fechas patrias en territorio mexicano, pues prefirió seguir con su misión de ayudar a quien más lo necesita en el país de Belice, que observar como algunos de sus paisanos se contagian de COVID-19 intencionalmente acudiendo a lugares con aglomeración durante el “Grito de Independencia”. 

Se trata de Tania “N”, una joven monja que decidió dejar atrás el patriotismo y orgullo de ser mexicana para así arribar a otro territorio para brindar sus servicios caritativos, pues indicó que en dicho lugar la necesitan más que en México, pues ahí no tienen los mismos recursos que en su país natal. 

“Vengo de la Ciudad de México y mi destino será llegar a Belice, un lugar muy bonito pero pobre donde necesitan mucho de mi ayuda tanto para la salud como espiritual; sé que en la situación en la que vivimos no es la mejor, sin embargo, con la fe hacia el señor y mis ganas, iré a dar mi mayor esfuerzo para ayudar a nuestros vecinos”, comentó Tania “N”. 

Resaltó: “No es de mi prioridad festejar el grito de la independencia, y mucho menos salir a exponerme ante esta pandemia, por lo que me siento más segura en Belice, lugar donde pretendo vivir para cumplir mi misión”. 

Dicha monja, no solo habló de su misión de congregación, sino igual aprovechó para descalificar la actitud de muchos mexicanos e incluso extranjeros que arriban el polo turístico, quienes no cumplen con los protocolos establecidos para la salud, mismos que prefieren divertirse en lugares concurridos que cuidarse en casa. 

“Pienso que las autoridades deberían implementar medidas más rigurosas en estos casos, aunque también en estos casos deben ser conciencia de la sociedad, para así protegernos todos evitar reuniones masivas; no es justo echarle toda la culpa al gobierno de actos que nosotros mismos cometemos y consecuencias que causamos”, apuntó.   

Por su parte, deseó que en este cambio al color amarillo en el semáforo epidemiológico, le vaya bien a todos los trabajados que buscan su sustento cada día, pues este cambio les dará más accesos a los visitantes que dejaran una moneda más para cada individuo.

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RM