Así luce el Auditorio del Bienestar, 'elefante blanco' de Roberto Borge en Cancún: FOTO

El exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo recibió más de 240 millones de pesos para el Auditorio del Bienestar
martes, 31 de agosto de 2021 · 10:54

El Auditorio del Bienestar, que recibió más de 240 millones de pesos durante el Gobierno de Roberto Borge Angulo, permanecerá como una obra inservible. La Secretaría de Obras Públicas del Estado reconoce que requiere alrededor de 160 millones de pesos para ponerlo en operación.

Fue el 14 de septiembre del 2016 cuando se inauguró esta obra, considerada la más costosa de la administración 2011-2016; sin embargo, hasta la fecha la gran cantidad de recursos públicos invertidos no se ha visto reflejada en beneficios para los ciudadanos quintanarroenses.

Por un momento, la administración de Carlos Joaquín González manifestó la intención de recuperar el Auditorio del Bienestar, incluso con la idea de que fuera la sede del C5; sin embargo, el inmueble en cuestión se mantiene inservible, pues no está en condiciones de ser aprovechado.

Actualmente, la Secretaría de Obras Públicas reconoce la necesidad de inyectarle recursos por el orden de los 160 millones de pesos sólo para poder concluirlo y ponerlo en operación.

Además, existe un vacío de responsabilidad entre las autoridades de varias dependencias del Estado, como la propia Seop, la Secretaría de Turismo, la Cojudeq y la Agepro, de las cuales ninguna se hace responsable del inmueble.

El titular de la Seop, William Conrado Alarcón, explicó que al Auditorio del Bienestar le falta un muro, una planta de tratamiento, una subestación eléctrica y área de estacionamiento, entre otras cosas, para poder ser utilizado, lo cual implica un monto de 160 millones de pesos, recursos con los que no cuenta la Entidad.

Todo indica que el Auditorio del Bienestar se sumará a la Megaescultura o Monumento al Mestizaje y al Centro Internacional de Negocios y Convenciones de Chetumal, como auténticos elefantes blancos.

Cabe mencionar que, al final de la administración de Roberto Borge Angulo, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) solicitó a la entonces Secretaría de la Gestión Pública de Quintana Roo iniciar un procedimiento administrativo sancionatorio contra funcionarios de la entonces Sintra (actualmente Seop), quienes por acción u omisión permitieron que el Auditorio del Bienestar se construyera sin dictámenes, permisos ni las licencias correspondientes.

La obra de más de 200 millones de pesos tenía el propósito de poner a Cancún como un referente para conciertos y espectáculos internacionales; no obstante, hasta la actualidad no puede ser utilizado por fallas en la planeación, como son la falta de un estacionamiento y climatización insuficiente para las 12 mil personas que puede albergar.

El recinto cuenta con ocho mil gradas en tres niveles y cuatro mil butacas en un área desmontable de la parte inferior del inmueble, misma que tiene base de estructura de acero y concreto, fachadas de aluminio y cristal.

De las cuatro auditorías aplicadas a la fecha, se derivaron cinco observaciones, de las cuales tres fueron solventadas por la Entidad fiscalizada, en este caso la Sintra, mientras que las restantes derivaron en dos recomendaciones y dos  promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria.

Una de las dos observaciones no acreditadas por el Gobierno de Quintana Roo tiene que ver con el hecho de que Sintra no acreditó contar con las licencias ni permisos de la obra; tampoco tramitó la correspondiente Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).

En ambos señalamientos, el Gobierno estatal alegó que no tramitó la licencia de construcción por tratarse de una obra municipal, además de que tampoco tramitó la MIA porque el auditorio se encuentra dentro de un predio previamente impactado que no requería tal permiso federal.

En la segunda observación, la Auditoría Superior señaló que el inmueble no cuenta con un área de estacionamiento, “no obstante que en el expediente único presentado por la entidad fiscalizada para la autorización de recursos, el proyecto incluye la construcción de un estacionamiento con capacidad para cuatro mil vehículos y 20 autobuses”.

De tal manera, esta megaconstrucción se mantiene como un elefante blanco al no tener tiene ninguna utilidad para la ciudadanía del principal polo turístico de Quintana Roo.

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JCL