La empresa Calica recibió un golpe al ser clausurado el parque Sac Tun por parte de personal de la Fiscalía General de la República (FGR) realizado en Playa del Carmen en medio de secrecía, pues los agentes provenientes de la Ciudad de México colocaron sellos en los accesos al lugar.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) tenía en la mira a la compañía, pues se detectó que estaban explotando más superficies de tierra, de las establecidas en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) entregada por la empresa para obtener el permiso de trabajar en la zona.
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En el año 2017, la Profepa visitó as instalaciones del Parque Sac Tun de Calica para verificar la extracción de piedra caliza del subsuelo de la Riviera Maya, lo que llevó a que al años siguiente, la dependencia federal colocara sellos de clausura en el parque, por exceder la superficie de extracción.
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Luego de ello, Calica recurrió a instancias internacionales donde demandó al Gobierno de México, tras recibir una multa de más de siete millones 985 mil pesos que no pagó, buscando prorrogar la entrega de una nueva MIA, ya que la actual había vencido en noviembre de 2020 y no podían seguir trabajando en el lugar.
Con todo y la MIA vencida, siguió laborando en Playa del Carmen, por lo que se le impuso esa multa; en la demanda contra las autoridades mexicanas, pidió una indemnización de más de 1,500 millones de dólares.
En julio pasado, la Fiscalía General de la República visitó el parque de Calica y apenas hasta ayer, trascendió este aseguramiento; aún las autoridades de la FGR no han confirmado si existen personas o ejecutivos de la empresa detenidos durante la clausura del lugar.
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CG