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El retroceso al color naranja del Semáforo Estatal de Riesgo Epidemiológico debe ser visto como una advertencia y un llamado a cuidarnos o de lo contrario regresaremos al color rojo, y si regresamos al rojo será catastrófico para miles de negocios que estaban en proceso de recuperación económica, porque volverían a cerrar en una nueva fase de confinamiento, señaló el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur) de Chetumal-Tulum, Juan Jaime Mingüer Cerón.
El empresario chetumaleño dijo que la fase naranja del semáforo no implica el cierre de las empresas no esenciales, que en el caso de la Canaco Chetumal-Tulum son alrededor de 2 mil 400 agremiados, quienes podrán seguir operando sin mayor problema, aunque con menor capacidad y aforo de clientes.
El mayor riesgo, consideró Mingüer Cerón, es que el semáforo vuelva a estar en rojo, ya que eso implicaría un nuevo confinamiento y el cierre de aquellos negocios no esenciales, que en el caso de la Canaco más del 90% de sus empresas caen en esta categorización.
Recordó que la etapa de cuarentena, que comprendió de finales de marzo de 2020 a junio de ese mismo año, causó el cierre definitivo de aproximadamente 100 empresas entre sus agremiados, por lo que un nuevo periodo de inactividad podría llevar a la extinción de un número similar o mayor de negocios en el centro y sur del estado.
Esto es porque los empresarios que ya están trabajando tuvieron que hacer una fuerte inversión para adecuar sus establecimientos en materia sanitaria y cumplir con todas las medidas de higiene y prevención del COVID-19, muchos de ellos recurrieron a préstamos o créditos y otros más agotaron el poco capital que les quedaba, por lo que obligarlos a cerrar sería fulminante para su economía al no tener oportunidad de recuperar lo invertido.
“Creemos que el regreso al color naranja no es tan dañino para nuestros agremiados, ya que podemos seguir trabajando y la mayor afectación es que se reduce el aforo por tipo de empresa; pero sí tenemos que verlo como una advertencia y un llamado a cuidarnos para evitar retroceder al rojo del semáforo, porque en ese caso sí será catastrófico, al entrar a un nuevo confinamiento todos los negocios no esenciales volverán a cerrar y se perderán miles de fuentes de empleo”, expresó Mingüer Cerón.
De ser necesario, las autoridades deben aplicar castigos severos a quienes no cumplan con las medidas sanitarias de prevención del COVID-19, tal y como ocurre con las empresas, de manera que se multe económicamente a cualquier ciudadano que realice fiestas, reuniones o eventos sociales; que no use cubrebocas o que lo use incorrectamente, que presentando síntomas ande en la calle y no lo notifique a las autoridades de salud, entre otras faltas.
“Se necesitan medidas más drásticas y empezar a sancionar para evitar un retroceso y poder seguir avanzando en el semáforo, porque lamentablemente mucha de la sociedad no está cumpliendo, no están siendo responsables y eso es lo que está ocasionando una nueva y más rápida ola de contagios. Hacemos un llamado a la población en general para que no bajemos la guardia, para que sigamos cuidándonos y cuidemos a nuestros seres queridos; necesitamos ser responsables por el bien de nuestra salud y de nuestra economía”, concluyó el presidente de la Canaco.
MA
