Deficiente servicio de recolección de basura en Chetumal

La administración municipal de Otoniel Segovia mantiene un deficiente servicio de recolección de basura en Chetumal.
miércoles, 6 de enero de 2021 · 12:42

La incapacidad del alcalde Otoniel Segovia Martínez, para resolver el problema del basurero y del servicio de recolección de basura en Chetumal, sigue siendo una de las falsas promesas del gobierno municipal que prometió una transformación pero no ha cumplido.

Chetumal tiene un tiradero a cielo abierto que genera malos olores, humos, gases y partículas en suspensión por el arrastre de los vientos.

El sitio de disposición final de los residuos sólidos urbanos ha sido sobrepasado por una ciudad en la que se generan alrededor de 300 toneladas diarias de desperdicios.

El gobierno municipal de Othón P. Blanco ha reconocido su incapacidad financiera para adquirir un predio para el nuevo sitio de disposición final de la basura, incluso anunció que pediría el apoyo de la federación y del estado, siendo que requiere entre 150 y 200 millones de pesos para ello, sin embargo hasta el momento no hay avances.

Los retos para solucionar el problema del basurero son enormes. Hasta el momento el tiradero municipal no está clausurado y que aún su operación es inadecuada, a pesar que desde 2019 la Procuraduría de Protección Ambiental de Quintana Roo pidió al gobierno de Othón P. Blanco cumplir con 29 acciones para el correcto funcionamiento del sitio de disposición final (regularización).

Entre las más importantes, se requiere que el gobierno municipal ejecute un programa de clausura, posclausura y monitoreo del sitio. 

La ciudadanía constantemente se ha quejado que el gobierno municipal no está preparado para atender esta responsabilidad.

Los colonos que viven en la periferia del tiradero recriminaron la falta de resultados en materia de servicios públicos.

Las afectaciones a la salud humana debido a los agentes físicos, químicos y biológicos contenidos en la basura son el efecto principal de una deficiente gestión de los residuos, lo que provocó que al principio y final del 2019, el gobierno de Othón P. Blanco enfrentara sendos procedimientos tanto en materia ambiental como legal, por la deficiente operación del tiradero de la capital.

En los últimos años la generación de residuos en Chetumal se ha incrementado y la composición ha cambiado de ser en su mayor parte orgánica a no biodegradable, lo que hace más difícil su manejo.  

Sin embargo, éstos no han propiciado mejoras en el servicio, sino todo lo contrario, se convirtió cada vez más deficiente hasta llegar al punto del colapso.

Los camiones de basura

En la presente administración se han adquirido cuatro unidades recolectoras y la renta de otras 10 unidades, con lo que la ciudad paso de tener 5 a 17 unidades para este servicio.

Sin embargo aun sabiendo que el servicio aún está rebasado por la cantidad de desperdicios que se generan en la capital durante el último año no ha habido nuevas acciones para mejorar la recolección de basura.

Al principio de la administración, Otoniel Segovia fue cómplice del incumplimiento de contrato de la empresa Amex Eco Solutions, que debió poner a disposición desde el mes de febrero de 2019 un total de 10 unidades recolectoras y nunca lo hizo hasta julio de ese año que el Cabildo decidió rescindir el contrato, ante la injustificada oposición del presidente municipal. 

La empresa nunca presentó las 10 unidades recolectoras, apenas llegó a cuatro, además de que constantemente se descomponían las unidades, al grado que regidores presentaron una queja ante la Contraloría Municipal.

La protección de Otoniel Segovia a esa empresa tuvo como consecuencia meses de inoperancia en el servicio de recolección de basura, afectando la calidad de vida de los capitalinos y representando un foco de infección.

Posteriormente, se logró la adquisición de cuatro camiones recolectores, por un monto 4.5 millones de pesos, debido a los recursos recuperados en juicios contra exfuncionarios municipales.

Para el 18 de octubre de 2019, diez camiones recolectores nuevos fueron puestos en marcha por parte de la empresa Multiservicios Mercantiles BUMA contratada para renta y mantenimiento de estas unidades.

El contrato fue por 24 millones de pesos, a razón de un millón de pesos mensuales que hasta el momento han transcurrido 15 meses, es decir que la comuna de acuerdo con el contrato tendría que haber erogado alrededor de 15 millones de pesos y tendrá pendiente pagar 9 millones de pesos este 2021 hasta que concluya la administración. 

Aun con la adquisición de estas unidades se mantienen quejas en colonias respecto al servicio de recolección de basura, uno de los sellos que ha tenido el gobierno de Otoniel Segovia Martínez

Hace un año intentó cobrar la basura a la ciudadanía

Aunque no logró su objetivo, Otoniel Segovia Martínez, tuvo la intención desde finales de 2019 de  implementar el cobro por la recolección de la basura a casas habitación.

Los cobros por este concepto únicamente incluían el servicio de recolección y transportación de los residuos sólidos, sea casa habitación o giro comercial, pero no contemplaban el servicio de tratamiento y destino final de los residuos, a los que como autoridad municipal está obligado a garantizar un adecuado manejo y tratamiento de los mismos.

Además, en ningún momento mostró contar con un plan concreto y medible de lo que hará con la recaudación resultantes del cobro de la recoja de basura a los domicilios, y tampoco realizó un estudio para determinar el aumento de impuestos a los ciudadanos. 

El gobierno municipal proponía cobrar a partir de 2020 un impuesto a por la recolección de basura a las casas habitación, a razón de 365 pesos por año.

Sin embargo, el Congreso del Estado rechazó la propuesta y el alcalde capitalino se quedó con las ganas de contar con una bolsa millonaria de recursos que eran para su libre disposición.

CG