'Uri', el pavo que está causando sensación en playas de Cozumel
Rosalba Welsh Cervantes, dueña de la mascota, aseguró que es la mejor inversión que pudo hacer.
Gran sensación fotográfica está causando "Uri", un pavo de engorda que se ha convertido en la fiel compañía de Rosalba Welsh Cervantes, quien aseguró "es la mejor inversión que pude hacer. Uri me acompaña a la playa, me espera ansiosa en casa y hasta mis gatos le quieren". Turistas y locales acuden a la playa para tomarse una foto con la peculiar mascota.
Dicho lazo afectivo inició hace tres meses cuando Rose Welsch acudió a una tienda de abarrotes para hacer un poco de despensa ante el anuncio del impacto del huracán "Delta", en octubre de 2020, cuando escuchó el glugluteo de un ave diminuta debajo de una mesa, encontrándose un pavo doméstico de apenas unas semanas de haber brotado, por lo que optó por pedirla para evitar que se quedara sola en la tienda durante el huracán.
Desde entonces, "Uri" como le bautizó, comenzó a desarrollar comportamientos de amistad con su dueña, quien lo cargaba en bolsas al salir de casa para poder pasearle, pero debido a su rápido crecimiento la gente comenzó a "saborear" al pavo e incluso se acercaban a ella para comprarle al ave, aclarando que no era para cenar en la Navidad sino que es su mascota.
La gente no se va sin su foto con 'Uri'
"Uri", con más de 20 kilogramos, acompaña a Rose todas las tardes cuando acude a la playa para disfrutar de la puesta del sol, lo que aseguró "es un momento que veo que disfruta 'Uri' porque se posa sobre unos costales y descansa a mi lado en ese momento".
La gente asombrada, ante el inusual hecho, aprovechó cada ocasión para tomar fotografías con el ya famoso pavo playero cozumeleño que en esta ocasión lejos de haber sido guisado, recibió un collar de regalo para que sea identificado como doméstico, compartió la entrevistada.
A diferencia de otros destinos turísticos, en Cozumel, el restaurante "La Momina", ubicado junto al balneario Casitas, abrió sus puertas para recibir a Rose y "Uri", permitiendo que el pavo haga uso incluso de los camastros en las horas que permanece en la playa junto con su propietaria que le lleva su alimento especial para que disfrute como cualquier otra mascota, concluyó la entrevistada.
CT
