Balneario Dos Mulas y Calderitas con lenta recuperación en Chetumal

Los balneario de Calderitas y Dos Mulas registran una lenta recuperación de visitantes en Chetumal
domingo, 13 de septiembre de 2020 · 10:33

Ligero repunte de un 5 por ciento en las venta se observó en la zona restaurantera de Calderitas, cuyo balneario artificial lució con poca afluencia, al igual que el llamado Dos Mulas en la ciudad capital, donde algunas familias salieron a caminar sin portar el cubrebocas, en vísperas del Semáforo Epidemiológico en amarillo, que comenzará el lunes 14, por lo que se espera mayor movilidad, expresó el representante de los restauranteros de Calderitas, Apolinar Gómez.

Luego de un recorrido por la zona restaurantera de Calderitas, se observó la presencia de comensales en algunos de los 28 restaurantes de dicha comunidad, a 5 km de la ciudad capital.

Sin embargo, varios de esos comensales se no portaban el cubrebocas, como ocurrió con los contados usuarios del balneario artificial de dicha zona, quienes se visualizaron sin usar el cubrebocas.

Al respecto, el representante de los restauranteros de Calderitas, Apolinar Gómez Cruz, expresó que todos los restaurantes de la zona están acatando las medidas sanitarias desde la entrada al establecimiento, con el tapete sanitizante, gel y agua con cloro, pues nadie quiere otra sanción a su local, como ocurrió hace un mes a un compañero por la venta de cerveza fuera de horario.

Dijo que se apreció un aumento de al menos un 5 por ciento de clientela, por lo que esperan que para la próxima semana, cuando el semáforo epidemiológico esté en amarillo, se incrementen las ventas, por lo pronto acatarán las medidas sanitarias y el número permitido de usuarios de forma limitada.

Personal de los restauranteros comentaron que visualizaron a inspectores del ayuntamiento capitalino supervisando que se acate el protocolo sanitario.

Mientras que en el balneario artificial Dos Mulas, al que tradicionalmente acudían alrededor de 100 a 200 personas, con la presencia de venteros de chicharrones, elotes, aguas y diversos antojitos, en este sábado sólo se observaron contadas familias caminando, pero en su mayoría sin el uso del cubrebocas.

En tanto que sólo un ventero ambulante sobre su triciclo se pudo visualizar en dicho sitio, donde predomina el abandono del andador turístico de madera, hoy en día en total abandono y con las maderas destruídas.

Por Moisés Omar Soto Suárez