Familiares continúan con la búsqueda de personas desaparecidas en Quintana Roo

En los municipios de Solidaridad, Cozumel, Lázaro Cárdenas y José María Morelos, seis familias mantienen la esperanza de localizar a sus seres queridos.
lunes, 31 de agosto de 2020 · 12:45

El registro de personas desaparecidas sigue aumentando en nuestro país y aunque Quintana Roo no se encuentra entre los estado con el mayor número de casos, el fenómeno no es ajeno; en el estado hay 124 fichas activas.

Pero más que sólo números, son casos donde familias sufren ante la incertidumbre constante de no saber qué ha sido de su ser querido, que se debaten entre la esperanza de algún día poder encontrarlos y el dolor de no tener siquiera la certeza de un lugar para llorarles.

De acuerdo con la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas (CNBP), tan sólo de marzo a julio de este año desaparecieron mil 342 personas, 75 por ciento de ellas tienen entre 15 y 30 años de edad.

Leopoldo “Polo” Gómez

A poco más de un año de la desaparición de Leopoldo “Polo” Gómez, quien  ingresó al monte de un rancho y no salió, autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE), todavía mantienen activa la “Alerta Alba” en 32 estados de la República por su posible aparición.

Fue la última semana de julio de 2019 cuando trascendió la noticia de que Leopoldo Gómez, de 38 años, mejor conocido como ‘Polo’, en ese entonces capataz del rancho Buenavista, ubicado en la zona oriente de Cozumel, se había adentrado a una zona de vegetación, pero ya no salió.

“Polo”, personaje conocido entre la comunidad isleña, se extravió la tarde del sábado 27 de julio al ingresar al monte; sin embargo sus amigos se percataron de la situación cerca de las ocho de la noche, por lo que se notificó a personal de Protección Civil para que iniciaran con su búsqueda, sumándose al día siguiente personal del Ejército Mexicano, voluntarios y bomberos, incluso participaron caninos adiestrados en búsqueda, pero no se tuvieron resultados favorables.

Los allegados a “Polo”, incluso realizaron algunas acciones de acuerdo con sus creencias como presentar ofrendas dentro del monte, a fin de que si su conocido perdió el conocimiento o sufrió alguna lesión, se le permitiera regresar sano y salvo, pero a pesar de que ya transcurrió un año, no se han tenido noticias de su paradero.

Por su parte, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo en Cozumel, agotó los recursos referentes a las entrevistas con familiares y amigos e incluso en cuestión de la búsqueda de puntos o indicios de su posible paradero fuera del área señalada; sin embargo, debido a que todavía permanece abierto el expediente, se mantiene activa la alerta Alba en 31 estados, con los que se tiene colaboración.

Sandra Guadalupe

Sandra Guadalupe Jiménez López, originaria de Bacalar tenía 25 años de edad cuando desapareció en la colonia Luis Donaldo Colosio, luego de acudir a su jornada laboral, donde dejó de comunicarse con su familia y al cabo de algunas horas, preocupados, llamaron a su teléfono celular, el cual les mandaba a buzón. A un año ocho meses de su desaparición sus familiares no han podido conocer su paradero; su hermana Manuela Jiménez López informó que en un principio autoridades  tomaron sus datos, pero ignoraron información que ella proporcionó, por lo que aseguró que “en Playa del Carmen, la justicia brilla por su ausencia”.

De acuerdo con Manuela Jiménez López Sandra simplemente desapareció “y nadie supo nada”. Las autoridades tomaron datos, pero señalaron que posiblemente se había ido con el novio y les aconsejaron esperar dos días, para iniciar una investigación.

“Cada que vamos a preguntar acerca de la carpeta de investigación, ni la carpeta encuentran. Es mucha la impotencia de saber que les dimos datos de personas que pudieron saber de su paradero y jamás hicieron nada”. Se dio aviso a la Fiscalía General del Estado (FGE) y se abrió la carpeta de investigación FGE/QR/SOL/12/348/2018, así como se activó el protocolo Alba con el número 272/ZN/2018

Para Manuela y su familia sólo nos quedan dos cosas: “la esperanza y la fe en que alguien nos diga algo y la ayuda de las personas compartiendo su foto en diferentes grupos, pues tenemos que volver a saber de ella”. No desean que ninguna persona pase por lo que ellos han tenido que vivir: la incertidumbre de no saber si está sufriendo, si está enferma, si ya comió y sobre todo si está a salvo. “Me falta ella”, dijo .

Manuela dijo entender la tristeza de muchas otras hermanas que se encuentran desaparecidas.

“Es mucha angustia y el nudo en la garganta de no poder hacer justicia. La justicia no existe en Playa del Carmen, pero existe la Justicia Divina, de esa si nadie se salva y es la misma que nos permitirá volver a ver a nuestras desaparecidas”.

Rufino Moo Chale

Este octubre se cumplen tres años de la desaparición de Rufino Moo Chale en Kantunilkín, un trabajador del ayuntamiento del que hasta la fecha se desconoce su paradero, luego de que aparentemente se internara en las inmediaciones de la colonia Terencio Tah Quetzal a cortar maderas un viernes por la mañana y ya su familia no volvió a saber de él.

Este 20 de octubre se cumplirían los tres años de su desaparición, a pesar de que en su búsqueda participaron elementos de la policía, Protección Civil y voluntarios que peinaron hectáreas de selva en las cercanías de la colonia Terencio Tah Quetzal y las colonias aledañas.

Rufino tenía 49 años cuando desapareció en el 2017, recuerda su hermano Víctor, que, ya resignado, dijo que debido a los ataques de epilepsia que sufría pudo quedar desorientado y adentrarse más al monte y ahí perderse y terminar sin vida, pero a la fecha nunca encontraron ninguna pista, ni nada que los llevara a su paradero.

Las autoridades policiacas recuerdan que fue un caso muy sonado, porque se trataba de un trabajador conocido. También los habitantes sabían de su epilepsia por los ataques que sufría en horas de trabajo, pero que no eran muy frecuentes y que de haberle ocurrido en el monte, se pudo haber lastimado y quedarse en el lugar.

Explicaron que más de 30 personas, entre Protección Civil, voluntarios y policías, recorrieron hectáreas y kilómetros bajo la selva, pero no se encontró ningún indicio que asegurara que estuvo por las inmediaciones de la colonia Terencio, donde varios vecinos dicen haberlo visto con machete en mano y con la intensión de internarse a cortar madera.

Fueron entre tres y cuatro semanas de búsqueda. No se encontró ropa ni alguna pertenencia de él, incluso, un poco pesimistas, los brigadistas acudían a zonas donde sobrevolaban los zopilotes temiendo lo peor, pero sólo encontraban animales muertos y así pasaron los días y la búsqueda terminó, sin tener un solo rastro del trabajador.

Del tema, familiares del desaparecido señalan que se hicieron las denuncias correspondientes, se hizo la búsqueda y al no encontrar rastros, se suspendió, porque no se hallaban pistas que condujeran hacia dónde se había ido o qué le había pasado.

A la fecha la zona es recorrida por campesinos y no se han encontrado restos humanos y a tres años continúan con la incertidumbre de lo que le habrá ocurrido, aunque aceptan que por sus ataques pudo pasarle lo peor y en la selva pudo haber perdido la vida.

Hugo García, Rafael y Matín Mendoza

El 25 de marzo del 2019, se reportó en José María Morelos la desaparición de tres jóvenes, vecinos de la localidad de Chunhuhub, los cuales habían llegado aquí para estar en un baile de la feria de la primavera.

La desaparición de estos jóvenes fue denunciada en su oportunidad ante la Fiscalía General del Estado (FGE), misma que emitió la ficha de búsqueda, pero hasta siguen en calidad de desaparecidos.

Ellos son Hugo Adalberto García, de 23 años; Rafael Mendoza Cruz, de 21 años y Martín Mendoza Cruz, de 17 años.

El 4 de julio del mismo año, la Fiscalía General del Estado, emitió otra ficha para la localización de la joven Karla Iriana Quijada Tilam, pero, después de algunos días de haberse dado a conocer su desaparición, ella se comunicó con su madre y dijo que se encontraba en la ciudad de México.

Por Karina Carrión, Irelis Leal, Luis Enrique Cahuich y Lusio Kauil