Siete mil colmenas perdidas tras el paso de "Cristóbal" en Chetumal
El paso de la tormenta tropical "Cristóbal" representó la perdida de siete mil colmenas en Chetumal reportó el censo de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpe)
Siete mil colmenas de abejas se perdieron durante el paso de las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal el mes pasado; sin embargo, se continúa levantando el censo entre los apicultores del sur del estado, porque algunos perdieron lo poco que tenían.
Lo anterior lo dio a conocer el titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpe), Luis Torres Llanes, quien afirmó que se están buscando apoyos para subsanar los daños que sufrieron los apicultores.
Aunque lo apicultores reciben apoyo del Fondo de Aseguramiento de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, pues algunos forman parte de esa organización.
El representante de la Sociedad Cooperativa Flor de Tajonal y miembro activo de la Alianza Apícola Peninsular, José Eduardo Moo Pat, que congrega más tres mil 500 productores, señaló que los apicultores de la península fueron golpeados severamente por el fenómeno meteorológico que causó inundaciones de sus calles, accesos y destruyó de sus apiarios.
Aunque no tienen datos exactos, señaló que se trata de una pérdida total tanto en cultivos como de abejas, una afectación en pérdida total de miles de colmenas en todo el estado, según sus cálculos.
En su caso perdió más de una decena de colmenas y a sus abejas, “ni siquiera tengo abejas, no las puede encontrar, no hay lo arrastró el agua”, afirmó.
No obstante, hay otros apicultores que no han podido entrar a sus apiarios para poder evaluar el daño real que sufrieron y otros siguen incomunicados. Además muchas familias perdieron a sus animales de traspatio como aves, cerdos y los ganados.
Dijo que los apicultores trabajan con ciclos naturales, por ello esperaban las lluvias que son un fenómeno clave para los apicultores primarios, es decir, para aquellos que respetan las tradiciones de sus antepasados mayas.
Admitió que los campesinos sufrieron en los últimos dos años, ya que la sequía fue prolongada y, por consiguiente, fue difícil lograr la permanencia de las abejas en las colmenas; sin embargo, no se perdieron todas las colmenas como con las presentes
Por Luis Enrique Tuz
