Ocurrió antes que en Gaza

En este artículo de opinión, Jorge Gómez Barata, habla sobre los sucesos, como las guerras que ocurrieron antes de Gaza
miércoles, 28 de febrero de 2024 · 11:29

Las personas se entretienen con la crueldad extrema de los filmes sobre los duelos entre gladiadores en el Circo Romano, se reciben lecciones sobre la conquista de América y los cuatro siglos de la trata de esclavos sin emocionarse, el Holocausto cada vez conmueve menos, la Guerra de Corea es llamada la guerra olvidada, la reconciliación entre Estados Unidos y Vietnam excluye los excesos retóricos sobre el pasado y los bombardeos sobre la exYugoslavia recuerdan una página vuelta.

Cuando las ideologías entraron en remisión y desapareció la contradicción Este-Oeste que las alimentaba, la lucha de clases virtualmente cesó. En cambio, el terrorismo se internacionalizó y los conflictos son predominantemente globales. Las luchas nacionales son electorales y el arma de la crítica comienza a prevalecer sobre la crítica de las armas. De no ser por circunstancias que han reiterado la guerra convencional en Europa y la desproporcionada respuesta de Israel a la provocación de Hamas, el mundo estaría consumando cambios para bien.

La población civil fue blanco en todas las guerras, debido a avances tecnológicos, principalmente al desarrollo de la aviación militar, que alcanzó niveles demenciales en la II Guerra Mundial, concluida con los ataques nucleares sobre Hiroshima y Nagasaki, donde murieron unas 150 mil personas.

La aviación comenzó a tener un protagonismo decisivo cuando la industria bélica fue capaz de fabricar suficientes aparatos con tamaño, velocidad y autonomía para apoyar las operaciones de las Fuerzas Terrestres y alcanzar objetivos estratégicos en la profundidad del territorio enemigo. La aparición de los portaaviones creó las bases aéreas flotantes y móviles.

Durante la última conflagración mundial, Alemania, Japón, Unión Soviética, Gran Bretaña y Estados Unidos, en conjunto, fabricaron cerca de un millón de aviones de combate. Estados Unidos, 300 mil; Unión Soviética, 160 mil; Gran Bretaña, 130 mil; Alemania, 120 mil y Japón, 80 mil. De ellos fueron derribados unos 80 mil.

Desde el 1940, sobre Londres cientos de cazas alemanes y misiles dejaron caer toneladas de bombas. Un 29 de diciembre lanzaron 100 mil artefactos explosivos sobre la urbe. El drama fue aún más cruel en las ciudades soviéticas arrasadas hasta los cimientos.

Los ataques Aliados sobre ciudades, algunos con significación militar, fueron sobre todo respuestas. Los bombardeos masivos sobre Tokio comenzaron el 18 de abril del 1942. En julio del 1945 se arrojaron sobre la ciudad casi 45 mil toneladas de bombas. En la noche del 9-10 de agosto de aquel año, 334 superbombarderos B-29 lanzaron mil 700 toneladas de bombas incendiarias destruyendo la cuarta parte de la ciudad, área habitada por un millón y medio de personas, de las cuales unas 100 mil murieron.

A Europa no le fue mejor. Entre otras, en Hamburgo, Dresde, Leipzig, Colonia, Düsseldorf, Essen, Lübeck y Fráncfort, en las cuales los bombardeos de precisión contra objetivos específicos fueron sustituidos por los bombardeos por área, con empleo masivo de napalm para destruirlas totalmente.

Los aviones norteamericanos de día y los británicos de noche, machacaron constantemente las urbes con miles de toneladas de bombas y los civiles muertos se contaron por miles. A Guernica se sumaron decenas de otras ciudades.

Las bombas mataron tres millones de coreanos en tres años de guerra y en Indochina Estados Unidos lanzó unos 7.5 millones de toneladas de bombas, más que el total de las utilizadas en la II Guerra Mundial.

Todo ello ocurrió antes de Gaza, con la diferencia de que entonces se libraban guerras, lo cual no ocurre ahora. Otro dato notable es que estamos en el siglo XXI, en el punto más alto alcanzado por la civilización que clama por la paz en Palestina, Ucrania y en todas partes.