Todo es personal

viernes, 22 de julio de 2022 · 12:07

La decisión del Presidente López Obrador de declarar la obra del Tren Maya como prioritaria y de seguridad nacional para evitar mayores retrasos en su ejecución, pareciera ser a simple vista una decisión de su parte; sin embargo, esa medida se torna necesaria al conocerse los abusos que cometieron en su beneficio quienes tuvieron la etapa inicial del proyecto

Los tramos que se ubican en territorio yucateco no fueron la excepción de este tipo de corruptelas y cuya responsabilidad se orienta a dirigentes y exdirigentes sindicales vinculados con el CATEM. El grado de abuso de estos “líderes” fue tal que propició la intervención directa de altos funcionarios del Gobierno Federal para parar en seco estos actos considerados de alta traición a López Obrador, quien depositó su confianza en ellos.

Desde esta perspectiva se comprende la firme y categórica decisión del Presidente para poner orden, frenar posibles actos de corrupción y encausar ade[1]cuadamente esta importante obra de su gobierno. En medio de los violentos di[1]mes y diretes entre la gobernadora de Campeche Layda Sansores y su antecesor Alejandro Moreno, hoy presidente del C.E.N. del PRI, se dieron a conocer una serie de nombramientos y reacomodos en la dirigencia de ese partido político, destacando la designación del ex[1]Gobernador de Yucatán, Rolando Zapata Bello, como Secretario de Acción Electoral, lo que lo con[1]vierte en el tercero en el orden jerárquico de la estructura directiva.

Esto pone al exGobernador en la posibilidad de llegar a la secretaría general de su partido en caso de que Alito renuncie debido a los audios que están circulado y le han pegado duramente a la ya merma[1]da credibilidad del dirigente. En el mensaje que ofreció a los medios de comunicación, Zapata Bello, después del anuncio de su nombramiento, destacó la unidad, “lealtad” y fraternidad con Alito por parte de los cinco ex gobernadores que junto con él fueron incorporados al Comité Nacional. Quien quedó muy mal parado en la reciente visita del Profr. René Bejarano a Yucatán es el empresario Tuff y Mafud Contreras, organizador de un evento en Hunucmá al que se esperaba que asistieran dos mil personas y al que finalmente llegaron menos de doscientas.

Algunos personajes cercanos a Bejarano que este evento le permitió evaluar y poner a prueba la capacidad política de Mafud Contreras para cumplir con las importantes tareas encargadas a él para conformar la estructura en Yucatán del “Movimiento Nacional por la Esperanza”.

La evaluación realizada por René Bejarano no es cosa menor si se toma en cuenta que es uno de los personajes con mayor experiencia y conocimiento en la organización de estructuras políticas y territoriales en el país, además de ser considerado uno de los actores políticos más cercanos al presidente López Obrador, precisamente por su eficacia para las tareas de organización política. Un hecho histórico signifi có el cambio de dirigencia en la Fede[1]ración de Trabajadores de Yucatán, filial de la CTM, después de 27 años de estar al frente de esta organización obrera Mario Tránsito Chan Chan.

El relevo de dirigente se vio empañado por los problemas internos que atraviesa la federación ante el rechazo de buena parte de los líderes de sindicatos afiliados a esta central obrera a la designación de Luis Briceño Contreras como Secretario General. Atrás quedaron las lecciones de fortaleza institucional y disciplina que hicieron de la CTM la más poderosa organización obrera del país. Previo a la visita del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, a Mérida para reunirse con el empresariado yucateco, se tuvo que cambiar la sede de la reunión que sería en el club Campestre al centro de convenciones Siglo XXI, el motivo fue que todos los convocados confirmaron y ya eran demasiados los que querían asistir.

Uno de los que promovieron la visita fue el expresidente nacional de Canaco, el yucateco, José Manuel López Campos. Se nota que en Yucatán ya ven como el candidato a Adán Augusto. La diputada Fabiola Loeza, que renunció públicamente al PRI la semana pasada, decidió declararse independiente (es decir, sin partido), pero en la práctica, los que la conocen dicen que va a votar con el PAN.

Dante Delgado y su partido aun no dan su brazo a torcer en Yucatán para escoger a qué candidato apoyarán en 2024, en especial en lo que toca a las votaciones por la gubernatura del estado. Es más, ya han pintado su raya en lo que toca a darle apoyo pleno e in[1]condicional a Renán Barrera. Claro, se sabe que primero debe ser postulado por su propio partido y eso no está muy amarrado que se diga. Los puntos que represente Movimiento Ciudadano le serán muy buenos al PAN para estar más tranquilo. La alianza PRI-Mor de facto que ya todos comentan, con holgura ganaría hasta Mérida, con cualquier candidato. La razón es que la ola morenista se desplaza sin problema porque la oposición no tiene capacidad alguna de hacerle frente al Presidente. “La marcha contra el gobierno de Yucatán es organizada por un abogado dedicado a engañar a sus clientes…” -así corrían los comentarios tras la convocatoria de una supuesta defensa de trabajadores al servicio del estado por la aprobación de una nueva ley en el ISSTEY. Un total fracaso resultó la convocatoria de los diversos grupos que intentan aprovecharse de la ignorancia de la gente en torno a tan delicado tema, como son las finanzas del ISSTEY.

Los esfuerzos del gobierno por medio enderezar el futuro de ese organismo, son los primeros que se hacen en tiempos en los que el dinero bueno ha tenido que posponerse para salvar lo malo.

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