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Los expertos en música y aquellos que rechazan el reggaetón deben estar furiosos con el estudio que realizó un equipo de las Islas Canarias, ya que este reveló que el género latino genera una respuesta cognitiva con alto potencial, más elevado que la música clásica o la electrónica.
De acuerdo con el estudio, el reggaetón es capaz de activar todas las regiones del cerebro encargadas de procesar sonidos, movimiento y otras habilidades cognitivas. Asimismo, reveló que para las personas que no tienen formación musical previa, los efectos son inmediatos.
La revista Muy Interesante retomó el artículo de Los Ángeles Post, relacionado con dicha investigación en la cual se consideró una muestra de 28 personas de 26 años de edad, con preferencias musicales variadas.
Previo al análisis, señalaron los especialistas, se aplicaron pruebas auditivas para determinar sus capacidades musicales, es decir discriminar melodías e interpretar frases rítmicas.
Con base al proceso del analisis, por medio de resonancias magnéticas, se apreció la manera en la que el cerebro de los participantes reaccionaba a diferentes géneros a los que se les había quitado la letra. De esta manera, podrían interactuar con la música en su forma más pura. Los clips de éxitos como “Shaky”, de Daddy Yankee contrastaron duramente contra fragmentos de piezas de Vivaldi. Al escuchar reggaetón, el cerebro se veía mucho más estimulado que con otras manifestaciones musicales.
Los neurólogos encargados del estudio se llevaron una sorpresa al notar que los ritmos del género mencionado activaron regiones más primitivas del cerebro humano.
Con esto, los científicos se percataron que este tipo de música detona una maquinaria mayor para poder procesarla. Como activa las regiones motrices del cerebro, según la cobertura de Los Angeles Times, esto explicaría porqué las canciones de este género incitan a las personas inmediatamente a bailar: “[…] ese ritmo peculiar y repetitivo nos preparara para el movimiento, para bailar sólo con escucharlo”.
De acuerdo con los autores del estudio, el resultado más sorpresivo de la investigación fue que el reggaetón activa significativamente más las regiones cerebrales auditivas, motoras y sobre todo, los ganglios basales.
Los ganglios basales se encargan “de modular el movimiento y las respuestas relacionadas con el placer o el aprendizaje basado en la recompensa”.
Es la zona donde se origina la enfermedad de Parkinson, cuya estimulación mayor con temas de reggaetón constata el “poder de la música para impulsar una respuesta cerebral tangible y significativa“.
Uno de los autores de la investigación señaló que surgieron más dudas en torno al ritmo y su relación con los ganglios basales, pues hace falta más investigación en torno al tema.
“¿Podría ser esta respuesta tan llamativa de los ganglios basales, una zona primitiva del cerebro, consecuencia de la influencia de los ritmos jamaicanos y africanos de los que deriva el reggaetón? ¿O será la claridad del ritmo y la ausencia de complejidad tímbrica lo que hace más sencillo el procesamiento de este estilo musical? Son respuestas que tendremos que seguir buscando en las próximas investigaciones”, escribió Jesús Martín-Fernández, el autor en una columna para The Washington Post.
Jesús Martín-Fernández es compositor, neurocirujano en el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en Tenerife, España, y neurocientífico en el centro de investigación IMETISA.
Con información de la revista 'Muy Interesante', 'The Washington Post' y 'Los Ángeles Post'
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JAL
