Quién fue Flor Silvestre y cómo se convirtió en un ícono de la música regional mexicana

Nacida en Salamanca, Guanajuato, su nombre real es Guillermina Jiménez Chabolla.
miércoles, 25 de noviembre de 2020 · 15:39

Flor Silvestre fue una cantante y actriz mexicana que se convirtió en uno de los íconos más importantes del país tanto en la música regional mexicana, como en la llamada Época de oro del cine mexicano, pues se consagró entre las grandes actrices nacionales incluso internacionalmente.

Nacida en Salamanca, Guanajuato, Flor Silvestre fue bautizada como Guillermina Jiménez Chabolla, nombre que cambió en los años cincuenta cuando inició su carrera artística. Algunos de sus apodos eran “La Sentimental” y “La voz que acaricia” debido a que era poseedora de una de las mejores voces mexicanas, capaz de interpretar diversos géneros musicales como: ranchero, bolero y huapango.

Su padre era carnicero y su madre ama de casa, de ambos heredó el gusto por el canto y la música. Tuvo siete hermanos, ella fue la tercera en nacer. Desde muy joven participó en eventos de danza y teatro de su escuela, ya que siempre supo que quería ser artista. Sin embargo, estudió secretariado en la Ciudad de México, ya que sus padres se trasladaron a la capital en busca de mejores oportunidades.

Así inició su carrera musical

A sus 13 años debutó en el Teatro del Pueblo, después de que acudió a ver al Mariachi Pulido, actuación que la atrapó, por lo que pidió que la dejaran cantar con ellos, no obstante, el director de la agrupación se negó porque era novata. Sin embargo, el encargado del teatro, le dijo que fuera una semana después para llevar a otro mariachi y así fue que cantó frente a miles de personas que por primera vez reconocieron su talento.

Tras ese inesperado inicio de su carrera, empezó a participar en una emisora de radio; más tarde concursó en la XEW y finalmente, fue contratada para formar parte del elenco del Teatro Colonial.

A partir de ese momento, sus éxitos no pararon de llegar, grabó sus primeros discos y debutó en el cine en “Primero soy mexicano” de Joaquín Pardavé.

Trabajó con estrellas como Sara García, Pedro Galindo, Germán Valdés, José Alfredo Jiménez, María Felix, Capulina, el Loco Valdés y Miguel Aceves Mejía.

Su película más importante fue "Catalina", misma que fue la segunda película mexicana nominada al Óscar a mejor película extranjera. Por otro lado, la última filmación que hizo fue en 1990, un largometraje dedicado a Antonio Aguilar denominado "Triste Recuerdo".

Su vida amorosa

Tuvo dos matrimonios, primero se casó con el locutor Francisco Rubiales, pionero de la televisión mexicana; con él tuvo dos hijos: Francisco Rubiales y Marcela Rubiales. Presuntamente, se separó de él por una infidelidad.

Previamente había conocido a Antonio Aguilar, sin embargo, fue hasta 1957 cuando se enamoraron al filmar “El rayo de Sinaloa”; no obstante, una discusión que los llevó a separarse y Aguilar se casó con otra joven.

Más tarde en 1959, Aguilar se divorcia y se casa por el civil con Flor, con quien tuvo dos hijos: Antonio Aguilar y Pepe Aguilar, éste último a su vez es padre de Ángela Aguilar.

Para pasar sus últimos años, Aguilar le construyó a Flor Silvestre una residencia en el rancho conocido como “El Soyate”, en Zacatecas. Sin embargo, el también cantante falleció en 2007 a sus 88 años.

Este 25 de noviembre se anunció la muerte de Flor Silvestre con 90 años de edad, uno de los íconos mexicanos en el mundo.

Redacción Digital Por Esto!

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