La espera ha terminado para Santiago Giménez. El delantero mexicano resurgió con fuerza en el AC Milan mostrándose como un auténtico "Diavolo" al anotar un espectacular doblete que fue determinante para la remontada de su equipo, que venció 3-1 al Bologna este viernes en el estadio San Siro por la jornada 36 de la Serie A italiana.
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Después de 68 días, Santi Giménez vuelve al gol en Serie A para sellar victoria del Milan
El regreso del goleador
Giménez, quien entró al terreno de juego al minuto 65 en sustitución del serbio Luka Jovic, demostró que ha dejado atrás su momento más bajo desde su llegada al conjunto rossoneri. El atacante tricolor aprovechó al máximo sus oportunidades y confirmó sus cualidades como delantero de élite.
A diferencia de encuentros anteriores donde sus compañeros no le proporcionaban balones a pesar de sus constantes desmarques, en esta ocasión el equipo milanista funcionó como una verdadera unidad. El juego colectivo finalmente se impuso sobre el individualismo que había caracterizado sus actuaciones recientes.
Los goles del mexicano
El primer tanto de Santiago llegó al minuto 73, tras un brillante contragolpe en el que el estadounidense Christian Pulisic logró extenderle el balón luego de que la defensa bloqueara un centro proveniente del sector izquierdo.
El "Bebote" no desaprovechó la oportunidad y, perfilándose con su pierna zurda, conectó de primera intención con la parte interna del pie para superar al guardameta del Bologna, quien salió desesperadamente pero no pudo cerrar el ángulo de disparo. Este gol significó el empate 1-1, después de que los visitantes se habían adelantado en el marcador con tanto de Riccardo Orsolini al minuto 49.
La remontada del Milan continuó con un potente disparo de Pulisic que puso el 2-1 a favor de los locales. Pero fue nuevamente Giménez quien, ya en tiempo agregado, selló la victoria con una jugada individual de gran calidad.
El mexicano solicitó el balón a su compañero Samuel Chukwueze, quien atendió su petición. Ya con el esférico en su posesión, Santiago ejecutó un magnífico recorte hacia el interior con su pierna derecha, dejando atrás a un defensor antes de soltar un potente disparo que dejó sin oportunidad al portero rival para el definitivo 3-1.