Hamilton y Verstappen pelean por la cima de la Fórmula 1: INFOGRAFÍA

La rivalidad de la escudería Mercedes y Red Bull ha rebasado fronteras en la Fórmula 1, donde en el comienzo del primer circuito, el piloto inglés Lewis Hamilton y Max Verstappen también nos han regalado grandes disputas en cada una de las pistas. El próximo Gran Premio será en Bélgica, y tiene a los aficionados con las uñas entre los dientes por lo que podrá ocurrir entre esta gran rivalidad del automovilismo, que acrecenta en cada uno de los escenarios.

La primera carrera del año en Bahrein auguró una temporada repleta de emociones y polémica. La rivalidad del momento entre Lewis Hamilton y Max Verstappen se notó en el circuito, donde el piloto inglés se llevó el primer Gran Premio, luego de que el neerlandés tuvo que dejarse pasar por haber adelantado previamente al piloto de Mercedes por fuera de la pista. Decisión sorprendente porque los comisarios habían sido permisivos en ese punto en concreto del trazado. Checo Pérez concluyó en el quinto puesto.

En la siguiente etapa, en el GP de Emilia Romagna, Verstappen aseguró su primera victoria del año, después de completar la carrera en dos horas con dos minutos y 34 segundos en el Autódromo Enzo e Dino Ferrari Circuit. En Portugal, nuevamente Hamilton se coronó en la pista, y ya enrachado, también se llevó a España. Con ese par de triunfos se colocó por encima de su rival.

El trono cambió de rey, Verstappen demostró grandes habilidades al volante que lo hicieron regresar al triunfo en Mónaco. En esta pista, el piloto mexicano se mostró con mucho mayor protagonismo, tanto, que terminó llevándose el siguiente GP, en Azerbaiyán. El oriundo de Guadalajara ganó por delante del alemán Sebastian Vettel y del francés Pierre Gasly. Por primera vez en la historia acabó decidiéndose a una vuelta, luego de la bandera roja que provocó el neerlandés al accidentarse cuando lideraba la prueba, a falta de cinco.

En el circuito francés, la escudería Red Bull dio un golpe de autoridad con dos de sus mejores pilotos en la parte de arriba, Max en primero y Checo en tercero. 

Mientras que Lewis también apareció en esa lista tras terminar en la segunda posición. En las dos siguientes pistas, en Estiria y Austria, Verstappen se las llevó en el bolsillo, sin darle una diminuta oportunidad a su rival; entre tanto, el mexicano dejó de aparecer en la zona alta.

Gran Bretaña fue el recinto testigo del incremento de la rivalidad entre los pilotos y las escuderías. Lewis terminó coronándose en su país, recortando 25 puntos al líder del campeonato.

El triunfo del inglés, ante los ojos de Red Bull y de una gran fanaticada del automovilismo, expresaron su molestia por lo ocurrido en la primera vuelta, donde se señaló al ganador como tramposo por haber ocasionado el choque dl piloto neerlandés, que terminó por retirarlo en la primera vuelta. Su abandono no sobre pasó alguna consecuencia física, pero sí impactó en la lucha “limpia” que ambos sostenían.

El equipo austriaco intentó revisar la ventajosa victoria del inglés; sin embargo, cualquier intento fue fallido por falta de pruebas. Con esa tensión, Verstappen volvía a la pista en la siguiente prueba, en Hungría.

Si alguien habría dicho que en ese circuito ni el mexicano, ni el inglés, ni mucho menos Verstappen lo ganarían, seguro que nadie lo creería. Pero en Hungaroring se unieron todos los ingredientes para que ello sucediera. Bottas, de Mercedes, con su pasada de frenada en la curva 1, hizo que tanto él como Checo Pérez y Norris abandonaran, y a su vez, hizo que Verstappen perdiera toda la carga aerodinámica de la parte derecha de su coche. Posteriormente, Hamilton, con su error de estrategia, también decía prácticamente adiós al triunfo. El panorama perfecto para el automovilista Esteban Ocon de la escudería Alpine, que se libró del accidente por muy poco. Si este incidente hubiera ocurrido en otro tipo de circuito, lo más probable es que Ocon no hubiera ganado y lo hubiera hecho Hamilton con una remontada, pero sucedió en un circuito en el que es muy difícil de adelantar, por lo que el francés resultó favorecido en la conquista de su primer Gran Premio a los 24 años de edad.

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JG