A 27 años, sobrevivientes de plataforma hundida en la Sonda de Campeche piden justicia
En 1995 una barcaza de la compañía CCC terminó bajo el agua tras el paso de un huracán, dejando como saldo 10 muertos y 185 lesionados
Unos cinco obreros y sobrevivientes del naufragio de la barcaza DBL-269 el 15 de octubre de 1995, en que se perdieron vidas humanas, acusaron a la empresa J Ray Macdermott y asociados, que prestaban el servicio a Petróleos Mexicanos (Pemex) de que actuaron con negligencia y dejaron en el desamparo a los sobrevivientes al no pagarles las indemnizaciones ni liquidaciones luego del accidente en altamar.
Domingo Fuentes Hernández, uno de los sobrevivientes del naufragio, expresó que pese a las denuncias que se interpusieron en la Junta Federal de Trabajo, hasta la presente fecha no ha habido solución a sus demandas, conjuntadas en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje 07 de la Ciudad de México, en el expediente 380/2000.
Fuentes Hernández denunció la corrupción que ha imperado en el proceso, en donde incluso han desaparecido hojas del libro original donde se detallan los hechos, con la complicidad de los abogados que ellos mismos contrataron.
Evento dramático
Hay que recordar que el 15 de octubre de 1995, Una plataforma sin propulsión, propiedad de la compañía estadunidense CCC, zozobró en la Sonda de Campeche al paso del huracán “Roxana” y provocó que la Barcaza DBL-269, con 244 trabajadores a bordo naufragara. En ese accidente murieron siete trabajadores; sin embargo, solo fueron indemnizados obreros norteamericanos y españoles; a los 180 mexicanos los ignoraron. De estos, han fallecido 37 por las secuelas que les dejó el accidente; sin embargo, sus viudas siguen en la lucha.
Fuentes Hernández, sobreviviente de la barcaza 269, manifestó que los abogados que llevaban el caso estafaron a los trabajadores y decidieron de manera personal pedir una indemnización a J Ray Macdermott, pero no hubo respuesta.
Respecto a esta tragedia, Fuentes Hernández aseguró que la CCC y J. Ray Macdermott, más otros asociados que prestaban servicio a PEMEX, actuaron con negligencia al negarse a trasladar la barcaza hacia un lugar seguro ante “Roxana”.
“Tuve contacto con J Ray Macdermott sobre la resolutiva; tocamos puertas para que esto concluya, pero fui ignorado; algunos continuamos con la esperanza de que algún día nos paguen las indemnizaciones y nos hagan justicia”, apuntó.
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JG
