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La Gobernadora de Campeche, Layda Sansores San Román, así como la Universidad Vizcaya de las Américas, mantienen la postura de continuar con las actividades escolares presenciales, situación que genera inconformidades entre la comunidad estudiantil por el incremento en la curva de contagios por COVID-19 registrada en enero.
Durante la Mesa de la Construcción de la Paz del 19 de enero de 2022, la titular del Poder Ejecutivo de Campeche llamó a los padres de familia a llevar a sus hijos a las aulas a fin de continuar con las clases presenciales.
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Por otra parte, la Universidad Vizcaya de las Américas fue denunciada por los alumnos Luis, Enrique y Martín, quienes señalaron a la institución por obligarlos a firmar una carta responsiva, donde avalan su asistencia por voluntad propia y así, deslindarse de cualquier complicación en materia de salud.
En cuanto a las denuncias contra la Universidad Vizcaya de las Américas, los alumnos relataron que por medio de correo electrónico solicitaron información relacionada con los nuevos protocolos y las modalidades de clase, misma que fue respondida con un acta donde refiere “por obligatoriedad las clases son presenciales”; decisión tomada según la fecha de la circular, en noviembre del 2021, cuando la curva epidemiológica se encontraba baja.
“Estamos entre la espada y la pared, por un lado, tenemos a nuestra familia que queremos proteger de no contagiarse, pero por otro, la universidad nos pide que vayamos o si no, reprobamos y no está chido que paguemos, no nos enseñen y nos reprueben”, comentó Enrique.
La propia institución emitió a los correos personales de los alumnos el documento “carta compromiso” donde asegura que los muchachos asistirán por decisión propia sin considerar el Semáforo de Riesgo Epidémico y así, deslindarse de algún probable brote de COVID-19 entre la comunidad estudiantil que, al día de hoy, no registra casos positivos.
En contraste a la postura gubernamental, el Centro Educativo Xail, dirigido por Ana Florencia Heredia Ávila, madre del Fiscal de Campeche, Renato Sales Heredia, decidió detener las clases presenciales hasta finales de enero por petición de los padres de familia.
La postura gubernamental también se da tras el llamado de la Secretaría de Educación del Estado de Campeche (Seduc) a mantener clases escalonadas presenciales, así como la decisión de las escuelas asociadas a la Federación de Escuelas Particulares del Estado de Campeche (Fepcam), de suspender actividades en las aulas durante enero. En las escuelas de la Fepcam sólo asisten alumnos con necesidad de asesorías y quienes adeudan materias.
Aparte, la indicación de la mandataria estatal Layda Sansores San Román fue para “no retrasar la educación y evitar el daño psicológico por el encierro de los niños y adolescentes”, cuya postura resaltó por la falta de nuevos planteamientos y estrategias claras para evitar contagios entre alumnos y docentes. “A pesar de que han aumentado los casos de COVID-19 no hay reportes de que haya afectación grave a la población en general; la variante el virus que nos afecta hoy, Ómicron, no tiene letalidad como la anterior”, precisó.
En Campeche los casos activos entre el 3, 10 y 17 de enero han registrado un alza de 136 y mil 64 por ciento, respectivamente, al considerar que el primer lunes había 111, el siguiente 322 y al inicio de esta semana mil 293 casos activos.
La Gobernadora indicó que las vacunas podrían ayudar a evitar un alto índice de complicaciones y decesos, pues desde el inicio del 2022 sólo han confirmado dos fallecidos.
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JG
