Palizada suspende fiesta patronal por contingencia sanitaria

Ante la contingencia sanitaria por COVID-19, Palizada decidió suspender sus fiesta patronal por primera vez.
domingo, 2 de agosto de 2020 · 14:53

Debido a la pandemia, por primera vez en la historia, fueron suspendidos los festejos al Señor San Joaquín, patrono de los católicos paliceños, que debían realizarse del 15 al 31 de agosto, dio a conocer el párroco Amado Perfecto Sandoval Martínez.
Informó que sólo está contemplado que el día 21 bajarán la imagen para colocarla en un altar que estará en uno de los extremos de la iglesia, donde los católicos podrán acudir a saludar y rezar, además habrá un novenario a partir del 22 con el Santo Rosario a las 18:00 horas, y al término de la misma se realizará la eucaristía.

Cabe mencionar que este año se cumplirían 253 años de las fiestas patronales, por lo que el prelado lamentó que por el coronavirus se interrumpe la conmemoración que reunía a cientos de católicos diariamente en torno  a la venerada imagen.
Amado Perfecto reiteró que durante los rezos será limitada la presencia de personas en el templo, para guardar la Sana Distancia y se aplicará gel antibacterial a los presentes, además de desinfectar todo el recinto antes y después de la homilía. 

Comentó que no habrá presencia de gremios, tampoco habrá procesión por río y tierra, y que el novenario se extenderá hasta el 31 de este mes, cuando de nuevo regresarán, sin ninguna ceremonia, la efigie a su lugar.

Perfecto Sandoval aclaró que el santuario permanecerá abierto todos los días, las 08:00 a14 horas y de 17:00 a 20:00 horas.
Finalmente, informó que un tecladista que pidió permiso le cantó las mañanitas al Señor San Joaquín en el interior de la ermita, pero a puerta cerrada, acompañado por sólo 10 personas más.

La Imagen data de 1766

De acuerdo con datos históricos, algunos escritos de paliceños y otros más que han pasado de boca en boca por generaciones, afirman que la veneración al Santo Patrono data del año 1766, afirmó el cronista e historiador José Jesús Espinosa Mateo.
Indicó que la fe y devoción en torno a la figura concentra a miles de personas anualmente para agradecer por favores recibidos a lo largo de todo un año. 

José Jesús expuso que sin duda la fecha más importante es la bajada del altar mayor el 15 de agosto al mediodía, cuando disponen de una rampa desde el piso, y la imagen es custodiada por un grupo de niñas vestidas con trajes de angelitos que le rocían pétalos de flores.

En esta ceremonia participan cientos de feligreses que durante los cerca de 35 minutos que dura el descenso se escucha el himno interpretado por músicos locales con música creada por Ambrosio Gil y al mismo tiempo repican las campanas, finalmente, al culminar la bajada, se entona otro himno en su honor.

Nace la adoración

El cronista señaló que hace 264 años el francés Andrés Constan, avecindado en un rancho, realizó la escultura en madera de San Joaquín, y desde entonces se empezó a venerar por los lugareños, quienes lo convirtieron en su Santo Patrono. 

Comentó que la iglesia es un edificio edificado en 1794, cuando Rafael de la Luz, gobernador del presidio, mandó al Virrey un plano y relación de materiales y gastos para la construcción, en la que se utilizaron 3 mil 400 tasistes, 2 mil cargas de guano y 300 cargas de bejuco; el cercado de tasistes fue cubierto con barro, se hizo el terraplén del piso y un campanario.

Este primer templo fue sustituido poco años después por el actual, el cual se edificó con enormes paredes y columnas de piedra, mismas que perduran con algunas pequeñas modificaciones, principalmente en el techado, que fue de lámina y hace cinco años lo cambiaron por teja tipo francesa, para armonizar con el primer cuadro de la ciudad.

Espinosa Mateo agregó que existe el compromiso del gobierno del estado en próximas fechas de colocar un nuevo piso de mármol, pues este edificio es patrimonio histórico de Campeche.

Por  Julio Gutiérrez