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Arqueólogos y personal contratado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) trabajan en labores de prospección, documentación y análisis de los vestigios arqueológicos que se han encontrado en el derecho de vía del Tren Maya.
Alrededor de 25 trabajadores se encuentran en la entrada de la comisaría de San Bernardo, Kopomá, donde está una de las zonas más grandes con posibles monumentos, muebles e inmuebles que se ha detectado en el Tramo 3.
De acuerdo con el informe del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) cerca del 48 por ciento de los vestigios arqueológicos hallados en la ruta del Tren Maya están en los tramos 2 y 3, que corresponden a Yucatán.
En todo el trayecto del proyecto se han encontrado 8 mil 333 monumentos, muebles e inmuebles que se han registrado y 3 mil 999 están ubicados en territorio yucateco.
El Tramo 3 es en el que se han dado más hallazgos con 2 mil 984, y hoy en esta zona hay varias en las que no se ha avanzado porque son áreas de exploración del INAH y personal de la dependencia está haciendo el respectivo trabajo de exploración y documentación, para determinar cuáles piezas deben conservarse.
Si bien la mayoría del trazo ha sido liberado por esa dependencia y se han llevado a cabo los trabajos del Tren Maya, hay otros puntos donde la empresa que tiene la concesión de las obras está a la espera de que se culminen los trabajos del INAH para seguir avanzando.
Una de las áreas donde se encuentra trabajando un nutrido grupo de arqueólogos y otros especialistas, es la zona por donde pasará el tren, en una de las entradas a la comisaría de San Bernardo en Kopomá.
En el lugar laboran unas 25 personas en una zona en la que se marcó una importante cantidad de vestigios. Sin embargo, el personal del INAH tiene la indicación precisa de no poder dar información a los medios de comunicación sobre la labor que realizan debido a que, entre otras cosas, se quiere evitar que haya posibles saqueos cuando los trabajadores no estén el lugar.
La encargada de los trabajos dijo no poder dar más información y que ésta debe ser solicitada a las oficinas centrales de la dependencia.
Consultado al respecto, el secretario general del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Secretaría de la Cultura Sección Yucatán, Daniel Vega Zepeda, aseguró que la información está totalmente centralizada por el INAH y que, en este sentido, no es personal de base de la delegación de Yucatán, sino que es personal contratado que rinde cuentas directamente a la dependencia.
Según fuentes que trabajan en la zona en cuestión, lo que se hace es trabajo de prospección arqueológica para determinar el valor y la importancia de las piezas que se encuentren, que hasta el momento son piedras y vestigios que pudieron formar parte de alguna estructura mayor, pero también podrían encontrarse vasijas u otros materiales.
Se deben determinar cronologías y sobre todo para decidir cuáles piezas, monumentos, bienes o inmuebles se van a conservar, ya en una fase de salvamento, pero también muchas piezas sólo podrían documentarse y no se preservarían.
De acuerdo con Fonatur, hasta el momento se han llevado a cabo más de 80 operativos arqueológicos del INAH. Con esta cooperación se busca rescatar y estudiar cada uno de los monumentos que se encuentran en el paso del tren.
Al día de hoy, como parte de los procesos de prospección y salvamento arqueológico que se llevan a cabo se han detectado en toda la ruta del tren un total de 8 mil 333 monumentos arqueológicos, muebles e inmuebles que formarán parte del acervo histórico, científico y cultural del país.
En el Tramo 1 (Palenque-Escárcega) se han registrado un total de 2 mil 327 monumentos arqueológicos. En el Tramo 2 (Escárcega-Calkiní) 2 mil 07. En el Tramo 3 (Calkiní-Izamal) son 2 mil 984 y en el Tramo 4 (Izamal-Cancún) son mil 015.
JG
